Dos personas sin hogar fallecidas en Granada en menos de 24 horas

Dos personas sin hogar han fallecido en Granada en menos de 24 horas. Una de ellas es Eduardo Justo, que vivía en la calle y era conocido por los servicios de asistencia y asociaciones de la ciudad. Ha fallecido en el hospital.

Y otro hombre, de 61 años, ha muerto tras caerse y sufrir un fuerte golpe en la cabeza en la Plaza de los Lobos. Los servicios sanitarios no pudieron hacer nada por salvar su vida. Se llamaba Manuel y era usuario de un centro de atención a transeúntes de la ciudad.

Los vecinos de la zona en la que se ha producido esta segunda muerte se quejan de la concentración de personas sin hogar en la plaza durante el día y la noche. Están recogiendo firmas para pedir soluciones al ayuntamiento.

Precisamente, este martes varias asociaciones han protagonizado un encierro en el consistorio para denunciar la falta de recursos para las personas sin hogar. Entre ellas, la plataforma Pro Derechos Humanos y la asociación "La Calle Mata". Su portavoz, Elisa Cabrerizo, reclama la necesidad de más albergues municipales.

Estos colectivos aseguran que hay unas 300 personas que cada día duermen en la calle en Granada. Denuncian que el consistorio no ha invertido en atender las necesidades de este colectivo, aunque tiene un presupuesto adicional de 18 millones de euros este año.

Aseguran que la situación se vuelve especialmente grave en estas fechas cuando se intensifica el frío en la calle. Los colectivos participantes en el encierro reclaman una reunión con la alcaldesa, Marifrán Carazo, y piden "compromisos reales" sobre sus reivindicaciones. Entre ellas, la creación urgente de un albergue de emergencia en el centro de la ciudad.

Se trataría de un albergue que ofrezca pernocta, socialización, higiene, lavandería y una consigna para pertenencias personales. A medio plazo, reclaman la apertura de centros de acogida en cada distrito que sirvan como espacios de refugio, alimentación y orientación cercana y el largo plazo piden el desarrollo de una política integral de vivienda pública que garantice el derecho a un hogar para todas las personas.

Estas protestas por las personas sin hogar han coincidido con la celebración el 10 de diciembre del Día Internacional de los Derechos Humanos.