Granada encarrila su demanda histórica de integración del tren en la ciudad
La inminente firma de un acuerdo entre el Ministerio de Transportes y el Ayuntamiento permitirá que el ferrocarril llegue mediante una plataforma y pone fin a dos décadas de desencuentro entre administraciones.
Supone la oportunidad de que se solucionen los tradicionales problemas del transporte de mercancías hacia el levante y se afiancen proyectos de futuro tan importantes como el Campus de la Azucarera de San Isidro.
Granada sigue dando pasos para poner fin a una demanda histórica como es la integración del tren, ya con la Alta Velocidad, en la ciudad. El principio de acuerdo que en unos días se va a firmar entre el Ayuntamiento de Granada y el Ministerio de Transportes es la prueba de ello.
Ese acuerdo va a permitir que el tren llegue a la ciudad de Granada a través de una plataforma, poniendo así fin a dos décadas de desencuentros entre adminsitraciones. Pero sobre, este proyecto todo ofrece ahora la oportunidad de que se solucionen los tradicionales problemas del transporte de mercancías hacia el levante y se afiancen proyectos de futuro tan importantes como el Campus de la Azucarera de San Isidro.
La aceptación del proyecto del Ministerio de Transportes por parte del Ayuntamiento de Granada es algo más que una oportunidad. Al margen de solucionar la cremallera histórica que ha soportado y dividido al distrito de La Chana, puede resolver incluso el problema de financiación que arrastra el consistorio por las miles de viviendas que saldrán de esta reordenación y que dejarán su rastro en las arcas municipales.
El futuro de la Azucarera de San Isidro es tan importante que hasta se están barajando dos opciones. Un cercanías con apeadero o una extensión de la plataforma de integración que incluso permitiría llegar a pie o en bici. Allí irá uno de los Campus con más futuro y atracción de la Universidad de Granada.
La insistencia de la variante de Moreda resolvería un gran problema con las mercancías, ya que permitiría que los trenes que no transporten pasajeros siguieran su trayecto hacia levante sin tener que entrar en la ciudad.
El entusiasmo entre administraciones de distinto color se comprende ahora en un proyecto cuyas obras podrían comenzar ya y rebajaría hasta los 230 millones los 760 que se presupuestaron por el soterramiento. Atrás quedan ideas como la que en 2013 planteó el Ayuntamiento con estación en el Cerrillo de Maracena, o la de Rafael Moneo en 2010 con un proyecto muy parecido al ahora aceptado que se descartó entonces por su alto coste.
