Interior devolverá a Marruecos a los activistas saharauis en huelga de hambre en Barajas
El ministro ha asegurado que no cumplen los requisitos para concederles asilo político en España.
Sus familias denuncian que son perseguidos en el país vecino y que están retenidos en el aeropuerto en condiciones infrahumanas.
Un grupo de de activistas saharauis que están retenidos en el aeropuerto madrileño de Barajas desde hace varias semanas han comenzado una huelga de hambre para exigir su asilo político en España. Según su representante legal, se trata de activistas perseguidos en su país, a los que se les ha denegado el asilo.
El Ministerio del Interior tiene constancia de que diez ciudadanos procedentes de Marruecos han comunicado oficialmente el comienzo de la huelga de hambre mientras están custodiados en la sala de asilo del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, aunque cinco de ellos han aceptado este lunes el desayuno.
El sábado, familiares de los solicitantes de asilo se manifestaron frente a la sede del Ministerio del Interior. Denunciaron las condiciones infrahumanas que están teniendo sus familiares durante su estancia en Barajas, por la falta de higiene y las picaduras de chinches, sin acceso a luz solar y con la misma comida desde hace veinte días.
Aseguran que tienen que ser considerados presos políticos, porque son perseguidos por Marruecos por sus labores de activismo. De hecho, siete de ellos van a salir trasladados a ciudades marroquíes, donde serán encarcelados, según ha advertido una abogada que les representa.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha precisado este lunes que estos activistas saharauis con pasaporte marroquí que permanecen en el aeropuerto de Barajas serán deportados y no son acreedores de protección internacional de conformidad con la ley.
"Van a ser devueltos con la ratificación judicial al respecto", ha señalado el ministro, si bien por protección de datos la Oficina de Asilo y Refugio no facilita detalles de por qué ha rechazado otorgarles protección.
En la sala de asilo del aeropuerto madrileño hay en la actualidad 57 ciudadanos marroquíes, de los que diez habían comunicado el domingo su decisión de ponerse en huelga de hambre, aunque sólo cinco han rechazado la comida este lunes
