Estos grandes mamíferos acuáticos protegidos que frecuentan las costas andaluzas, tienen la mala fama de ballenas asesinas. Por los numerosos percances que han causado últimamente a la navegación, conviene que los conozcamos mejor. Puedes ver más noticias en Espacio protegido y el programa completo en la plataforma de CanalSur Más.
En el Estrecho de Gibraltar hay al menos siete familias de orcas. Llegan con la migración del atún y están aquí desde febrero hasta principios julio. Es una comunidad ecológica matriarcal. Circe, una entidad no lucrativa creada en 1999 para la gestión del medio, tiene en sus bases de datos, la historia de muchas de esta orcas.
Las interacciones con los pescadores de la zona han aumentado en las últimas décadas. Algunas familias de estos cetáceos han utilizado técnicas de caza oportunistas en la baja de los pescadores, en el Monte Tartesos, donde también hay embarcaciones marroquíes.
Observamos a una madre con su cría. Las orcas esperan en silencio al atún. Su presencia provoca la huida hacia la costa donde están las almadrabas.
Otra técnica de caza es la persecución originada por la escasez de atún en el año 2007. En formación, un grupo persigue durante media hora al atún al que captura por agotamiento. La actual abundancia de alimento ha reducido el tiempo de caza a tres minutos. Eso podría dejarles mucho tiempo libre y llevarlas a dedicarse a jugar.
En los últimos diez años se han realizado 50 marcajes de cetáceos con satélite. Permitirán analizar las interacciones con veleros de los últimos tres años en el Estrecho.
Todas las administraciones están volcando recursos para el estudio por satélite de la estructura social, limitar los impactos en los encuentros y finalmente modificar el comportamiento de las orcas, que pudo tener su origen en un encuentro fortuito con una hélice.
En el reportaje mostramos algunas imágenes que pueden ayudar a dilucidar si estas interacciones obedecen a un simple entrenimiento, o se trata de un intento de agresión.
En apenas una década se han pasado de 40 orcas y 5 grupos a los 63 individuos, gracias a los planes de conservación desde 2017. La orca ibérica está ahora en el punto de mira de la comunidad científica internacional.