El Museo de la Comida Asquerosa quiere promover la tolerancia a otras culturas
Al proponernos esta visita tan chocante, nuestro guía deja claro que no anda corto de sentido del humor. Es Axel Robles, un cocinero malagueño que debería haber regresado hace tiempo a vivir a su tierra, pero la pandemia y 3 angelitos se lo impidieron. Si quieres ver más noticias destacadas, visita la web de Andalucía X el mundo. Y en la plataforma de CanalSur Más tienes los programas completos.
No tiene nada de broma. Tanto es así que el ticket de entrada al Museo de la Comida Asquerosa de la ciudad sueca de Malmö, se convierte en una precavida bolsa para vomitar, porque nunca se sabe. El museo pretende desafiar nuestras percepciones sobre lo que es comestible. A través de una exhibición de alimentos considerados repugnantes en diversas culturas, nos invita a reflexionar sobre cómo la cultura moldea nuestros gustos y a cuestionar nuestros propios tabúes.
Entre otros lugares destacados, visitamos con Axel Robles también la Plaza Grande, la más antigua de Malmö; y damos un paseo por el viejo cementerio en el centro de la ciudad, que es un recurso muy utilizado para el esparcimiento.
A pesar de ser un hombretón con mucho mundo, que reside desde hace 7 años en Suecia, a Axel se le hace un nudo en la garganta cuando nos explica cómo no ha regresado todavía a vivir a Andalucía, como era su propósito. El hombre propone y la familia y el covid disponen.