Ana María Torres Castillo y su novio Óscar Arroyo fueron asesinados por disparos de escopeta en una zona conocida como camino de Las Cuevas a las afueras de Jaén, lugar frecuentado por jóvenes parejas. Tanto el arma homicida como los cartuchos nunca llegaron a aparecer. Un testigo, Benito Collado, aseguró haber presenciado los hechos y denunció a Juan Domingo León y José Miguel Núñez (tío y sobrino), como principales responsables de la muerte de la joven pareja. Los sospechosos fueron absueltos en dos ocasiones por falta de pruebas y porque la Audiencia de Jaén no creyó el testimonio de Benito Collado. En 2012, los delitos por el doble asesinato de Ana María y Óscar prescribieron dejando a toda la sociedad jiennense y a sus familiares sin respuestas.