Una decena de barcos han dejado de faenar y solicitan una reunión al Gobierno para que tome medidas extraordinarias que alivien la crítica situación que atraviesan. En un año se ha triplicado el precio del gasoil.
Una decena de barcos de la flota de cerco de Barbate permanece amarrada a puerto por los altos costes del combustible y otros gastos de materiales de trabajo. El precio del gasoil se ha triplicado en un año y ha obligado a los pescadores a quedarse en tierra.
La crisis energética ha supuesto que el precio del gasoil suba de 33 a 60 céntimos el litro. Tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia, el litro de gasoil cuesta 1,10 euros y necesitan 1.000 litros por cada jornada. A todo esto hay que sumar los costes de envases, hielos y mantenimiento, por lo que los gastos para faenar se han encarecido en un 40%. Una cifra que hace que la pesca no sea rentable ya que los precios del pescado en lonja no han subido.
Desde la Federación Andaluza de Pesca reclaman al Gobierno una reunión y que se adopten medidas extraordinarias tal y como se hizo en anteriores crisis.