Una caravana sonora, compuesta por centenares de vehículos, ha recorrido este jueves las calles de la capital
Los manifestantes también han mostrado su desacuerdo contra el nuevo sistema de evaluación de la DGT
A media mañana de este jueves partían del polígono cordobés de Amargacena. Prácticamente la totalidad de los trabajadores de autoescuelas se han echado a la calle. Dicen -desde el sector- que están asfixiadas porque el sistema de evaluación de la DGT desde el estado de alarma acumula un enorme retraso que lejos de resolverse se está agravando.
Eso supone que las autoescuelas no puedan atender al alumnado que decide sacarse el carnet de conducir. Y eso se está notando en sus negocios.
De ahí la unanimidad en la convocatoria. Nos lo cuenta Rafael Cruz, presidente de la asociación provincial de autoescuelas de Córdoba y Jorge Montenegro, trabajador en una autoescuela.
Coches, camiones, remolques, todo el parque móvil de estos profesionales han marchado hasta la Avenida de la Victoria, en una concentración que ha colapsado esta arteria principal de la ciudad hasta detenerse a pocos metros de la sede provincial de la Dirección General de Tráfico.
También se oponen a la implantación de un nuevo sistema de evaluación que sería nefasto -dicen- para Córdoba y agravaría si cabe más los retrasos.