Las claves del nuevo plan de regadíos en Doñana

La proposición de ley de regadíos de la Corona Norte del entorno del Doñana ha desatado un fuerte enfrentamiento político. Canal Sur analiza las claves de este plan.

¿A qué afecta? La ley pretende regular lo que se denomina la Corona Norte de Doñana. Los municipios afectados son: Moguer, Almonte, Lucena del Puerto, Bonares y Rociana. Pertenecen a la zona del Condado donde se cultiva el fruto rojo (hasta el 90% de la producción nacional). En hectáreas no hay una cifra oficial. La Plataforma en Defensa de los Regadíos del Condado habla aproximadamente unas 650 familias afectadas. El "Plan de la Fresa", aprobado en 2014 por el Gobierno socialista, toma como referencia "una foto del territorio" de 2004 y deja fuera cultivos que sí estaban activos en esa década posterior.

La siguiente cuestión sería determinar de dónde sale ese agua que contempla la Ley. Deja claro que no vendría del subsuelo de ese entorno de Doñana, sino sería agua superficial. ¿De dónde va a proceder ese agua? No del acuífero de Doñana sino de trasvases. En 2018 el Gobierno Central se compromete a realizar las obras para hacer una transferencia a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir de casi 20 hectómetros cúbicos. Sería un trasvase de los ríos Tinto, Odiel y Piedras, para garantizar garantizaría el equilibrio hídrico. También se contaba con la presa de Alcolea, Con todo este agua no habría problema para regar el entorno de Doñana. Han pasado 5 años y no se han hecho de obras, que serían competencia del Estado.

Y por último, ¿cuál es el objetivo de esta Ley? Pues quiere acabar con el problema de sobreexplotación que se ha generado en la zona y los "pinchazos" al acuífero: pozos ilegales que ponen en riesgo esa arteria principal de agua de Doñana.

Desde 2019, se han cerrado 166 pozos por Confederación y unos 300 por la Comunidad de Regantes del Fresno pero el control es muy complicado, son explotaciones pequeñas, y difícil de vigilar. Esta ley pretende dar un nuevo marco jurídico, quiere acabar con estos pozos a través del agua en superficie. En la actualidad la situación de Doñana, según un informa reciente del CSIC es grave, la mitad de las lagunas han desaparecido.