Exigen una retribución mayor de las petroleras por cada bombona. Piden al menos 4,8 euros, frente a los 25 céntimos actuales.
Este jueves se suspende el reparto, excepto en Valencia y en centros educativos, sanitarios y de servicios sociales.
La patronal del sector mantiene el calendario de suspensiones de reparto para los días 11, 17 y 23 de diciembre.
Los paros afectan a la distribución de más de 150.000 bombonas que a diario se suministran a más de 6 millones de hogares.
La huelga de repartidores de butano continúa y este jueves suma ya cinco jornadas de paro, a lo que se añade el encarecimiento de la bombona, un año más, con la llegada de los meses de frío.
El paro de los trabajadores del sector supone la suspensión del reparto domiciliario, pero seguirá garantizado en la provincia de Valencia y en las zonas afectadas por la DANA, en residencias de mayores, centros educativos, sanitarios o de atención social. La patronal advierte de medidas más duras si se agota el calendario de paros sin que el Ministerio de Transición Ecológica se haya sentado a negociar.
Así lo ha asegurado la Federación Española de Distribuidores de Gases Licuados del Petróleo (Fedglp). Según esta patronal, convocante de los paros, el Gobierno debería garantizar que sus transportistas reciben de los operadores una retribución de, al menos 4,8 euros por bombona, frente a los 25 céntimos actuales.
Los convocantes denuncian que los repartidores de butano atraviesan una situación crítica desde hace años, como consecuencia de que el sistema de actualización de la retribución que perciben por cada bombona lleva más de una década sin actualizarse.
Coincidiendo con el primer día de suspensión del servicio domiciliario, el pasado 5 de noviembre, el Ministerio de Transición Ecológica publicó el borrador de la orden que regula el precio del butano. Sin embargo, la Fedglp considera que está muy alejado de la retribución mínima necesaria que deberían recibir para cubrir los costes del reparto domiciliario. Esta patronal asegura que las condiciones impuestas por las petroleras obligan a los distribuidores de butano a trabajar a pérdidas.
Por ello, mantiene también el calendario de suspensiones de reparto el 11, 17 y 23 de diciembre. Además, hubo paros el 5, 13, 21 y 29 de noviembre.
Los paros afectan al reparto de más de 150.000 bombonas de butano que diariamente se suministran en toda la geografía española a más de 6 millones de hogares.
Los convocantes explican que durante el periodo de suspensión las agencias de distribución no realizan entregas domiciliarias a particulares ni empresas, aunque siguen garantizando el suministro a los puntos de venta.
Además, aseguraron que la suspensión no afecta a los usuarios en situación de vulnerabilidad social, centros educativos, sanitarios, de atención social, residencias de mayores, ni a instituciones sin ánimo de lucro.
Tampoco el servicio de reparto domiciliario de bombonas se suspenderá en la provincia de Valencia y en otras zonas afectadas por la reciente DANA, donde muchos hogares dependen de este suministro para su bienestar diario.