El torero madrileño se ha retirado de los ruedos en la Maestranza de Sevilla, en la que tiene el récord de 'Puertas del Príncipe' que logró abrir en hasta siete ocasiones a lo largo de su longeva trayectoria.
El Juli se ha despedido de los ruedos y lo ha hecho en Sevilla, una de las plazas donde en su trayectoria consiguió los triunfos más rotundos.
El veterano torero madrileño recibía la primera gran ovación de la tarde, la que le obligó a salir al tercio al terminar el paseíllo como homenaje de una afición que le ha visto triunfar muchas tardes sobre ese mismo albero, y con un resultado récord de hasta siete salidas por la Puerta del Príncipe.
Y hoy todo parecía apuntar a que podría lograr una octava, contando con casi todo a su favor menos con el aspecto menos predecible del toreo: el propio toro, y más en concreto el lote que sorteó de su divisa favorita, que fue el que se encargó de desangelar su adiós, pese a la oreja que acabó paseando de su segundo, el último toro de su vida que dedicó a Sevilla con la plaza de la Maestranza en pie.