El pedrisco caído ha destruido la cosecha de este año. Las pérdidas se producen tanto en aceitunas picadas como en las propias ramas que han dejado los olivos con cicatrices.
En Jaén, en Arquillos, en solo cuarto de hora se ha destruido la campaña de la aceituna. Una enorme granizada ha azotado con fuerza los campos echando a perder la cosecha.
El pedrisco caído ha destruido la cosecha de este año. Las pérdidas se producen tanto en aceitunas picadas como en las propias ramas que han dejado los olivos con cicatrices.
Así que este año no habrá allí aceite de oliva Virgen Extra y disminuirán considerablemente los jornales.