Empleo y reconocimiento: la mujer rural reivindica sus derechos
La Federación de mujeres rurales, a través de su técnica María Jesús Montilla, reclama en una entrevista en Despierta Andalucía, una red de apoyo y más ayudas para evitar la discriminación en el campo.
María Jesús Montilla, técnica de la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales, (FADEMUR), ha reivindicado una red de apoyo para conseguir oportunidades laborales en el ámbito rural. En una entrevista en Despierta Andalucía, ha explicado que todavía la mujer está "relegada al sector servicios".
Según datos de la ONU, la mujer supone entre el 40 y el 50 por ciento de la mano de obra agroganadera aunque, según el organismo internacional, se enfrentan a una discriminación significativa.
En España, de ese 40 por ciento de mano obra femenina con que cuentan las explotaciones agroganaderas, sólo un 25 por ciento son titulares y responsables de la explotación.
"Las explotaciones están a nombre del padre, del hermano del marido, ellas se encuentran trabajando sin ningún tipo de reconocimiento ni derechos. Una mujer que ha trabajado durante treinta años con su marido, tras el divorcio, la titularidad la tenía él y ella no había cotizado ni un solo día" ha contado Montilla.
El marco legal reconoce la titularidad compartida, sin embargo, en nuestro país no ha sido efectiva puesto que muy pocas mujeres han regularizado su situación como titulares, 750 en toda España, según el último dato aportado por el sindicato UGT.
Para María Jesús Montilla, las inscripciones compartidas no se realizan porque "suponen un doble cuota de autónomos a la seguridad social. y las explotaciones, la mayoría pequeñas, ya tienen falta de rentabilidad porque los productos no se pagan al precio que deben. Las ayudas no son suficientes. En Andalucía no llegan a 30 las titularidades compartidas porque hay pocos incentivos.". "Para la próxima reforma de la PAC esperamos que haya una perspectiva de género que incorpore a la mujer en el campo y sobre todo a la mujer joven ya que el campo está muy envejecido."
Hay un camino que recorrer, "faltan mujeres en las direcciones de las cooperativas pero hay que seguir trabajando", insiste María Jesús Montilla. "Un pueblo sin mujeres se queda sin vida, somos la matriz de la que giran muchas cosas. Necesitamos servicios, recursos para la mujer, por ejemplo para prevenir la violencia machista. Los datos dicen que una mujer en el campo vive una media de 20 años con su maltratador antes de denunciarlo, se necesita independencia económica", ha reclamado.
