La ley para el uso del cannabis con fines medicinales, a debate en "Días D Andalucía"

El Ministerio de Sanidad ha comenzado los trámites para desarrollar el Real Decreto con el que prevé aprobar la regulación del cannabis para su uso medicinal en España, una vez iniciadas las conversaciones con los colectivos implicados y tras obtener valoraciones previas al borrador presentado por la Agencia Estatal de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps).

El borrador de Orden Ministerial trata de establecer una regulación garantista en cuanto a la calidad de los productos y la seguridad de los pacientes, habilitando las vías legales disponibles para poder disponer de compuestos terapéuticos a base de preparados estandarizados de cannabis que hayan mostrado evidencia a la hora de aliviar el dolor y el sufrimiento de los pacientes, contemplando la administración por vía oral de estos compuestos.

Ekaitz Aguirregoitia, miembro de la junta directiva del Observatorio Español del cannabis medicinal, reconoce que están "contentos" con los pasos que se están dando desde el Ministerio y lo califica como "primera paso", dado que advierten que "vamos a presentar alegaciones porque hay cosas que no están recogidas".

Aguirregoitia afirma que, en este sentido, España es "una anomalía" dado que en Europa y países desarrollados como Estados Unidos, Canadá o Israel ya usan el cannabis con fines terapéuticos y se alegra de que cuando la ley entre en vigor "no vamos a tener que ir al mercado negro". Además, ha recordado que "España es la séptima potencia productora en cannabis medicinal que ahora se exporta".

Por su parte, Carlos Goicoechea, vicepresidente de la Sociedad Española del Dolor, también ha aplaudido los avances del Gobierno en la regulación de este uso del cannabis y espera que "antes de un año el Decreto esté sobre la mesa".

Sobre su uso contra el dolor, ha aclarado que "no es la primera opción sino una tercera o cuarta elección para aquellos a los que los tratamientos habituales no les han funcionado". Y en este sentido lo fija, sobre todo para "el dolor neuropático que es de los más difíciles de tratar" y también ha apuntado a los pacientes oncológicos "para aliviar el dolor y prevenir efectos secundarios".