Manu Sánchez hizo la comunión con un traje de novio
Con la ayuda de su madre, que acude al programa para darle una sorpresa, descubrimos también que fue un niño muy preguntón. Manu recuerda esa época de su vida en la que fue inmensamente feliz.
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El álbum familiar de Manu Sánchez está repleto de momentos felices. El humorista repasa su vida a través de las fotografías que le muestra Bertín. En la mirada a su infancia en el pueblo sevillano de Dos Hermanas, un periodo que recuerda "absolutamente extraordinario", descubrimos que era un niño bueno, muy listo y un preguntón insaciable.
Su madre tenía que recurrir a una sentencia divina, "porque Dios lo ha hecho así", para poner fin a su infinita curiosidad. Su padre echaba mano de la sabiduría popular con la frase" no preguntes por saber que el tiempo te lo dirá, que no hay cosa mas bonita que saber sin preguntar. "Después de 20 ó 30 preguntas, aparecía la autoridad...yo sabía que había tocado pared", comenta.
A Manu también le gustaba leer, devoraba los libros, y hacer puzzles de muchas piezas. Competía con su abuelo, que le hacía trampas, hasta que lo pilló. Dio "dopaje en numeritos", dice Manu riendo. Otra de sus pasiones era jugar al futbito, lamenta que "se ha perdido la postilla, con lo bonito que era que te picara, tú rascarte y que te dijera tu madre no te rasques que se te está curando".
Pero, ¿charlaba Manu mucho en el colegio, qué notas sacaba? Nos lo cuenta su madre Loli, que acude al programa para darle una sorpresa. Y sorpresa la que nos hemos llevado nosotros al enterarnos de que hizo la comunión con un traje de novio y el cura pensó que era un padre. Algo que no le dejó cicatriz, afirma que le gustan las comuniones porque "parece que se casan pero solos...a quién le amarga un dulce". No te pierdas este vídeo, aquí tienes todos los datos de su niñez contados con mucha gracia, la del gran humorista Manu Sánchez.
