Virtudes convirtió una aldea abandonada en un paraíso de turismo rural
El Acebuchal, una humilde aldea malagueña, estuvo abandonada durante 50 años. Los recuerdos de su niñez impulsaron a Virtudes a volver y convertirla en un lugar mágico.
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Los doscientos habitantes de aquella aldea, situada cerca de Frigiliana, fueron desalojados tras la Guerra Civil ante las sospecha de las autoridades de que colaboraban con los maquis. Durante 50 años El Acebuchal permaneció abandonado.
Virtudes Sánchez, descendiente de uno de aquellos primeros pobladores, siempre quiso volver a pisar sus calles, pero nunca imaginó que convertiría aquel lugar en ruinas en un precioso pueblo de turismo rural. En este vídeo nos cuenta los pasos que fue dando en esta hermosa aventura.