El cultivo de lentejas es escaso en Andalucía a pesar de que mejora la fertilidad del suelo
Su producción aumenta además la biodiversidad: La presencia de lentejas en la rotación de cultivos atrae a una mayor variedad de insectos beneficiosos, como depredadores y parásitos naturales de las plagas. ¿Quieres ver más noticias destacadas? Visita la web de Tierra y mar. Y el programa completo lo tienes en la plataforma de CanalSur Más.
Pocas fincas en Andalucía cultivan esta legumbre con un alto valor nutritivo, compuesta de hidratos de carbono y proteínas, además de una amplia variedad de vitaminas y minerales. La lenteja es un cultivo que sólo aporta beneficios. Fijan nitrógeno, mejoran la fertilidad del suelo y reducen el riesgo de plagas y enfermedades. Una leguminosa que cumple con el greening o pago verde de la nueva Política Agraria Común (PAC) y muy demandado por una sociedad, que cada vez consume más productos vegetales ricos en proteínas y sin gluten.
Los trabajos de siega llegan a su fin en el Cortijo Ruchenilla, una finca de 450 hectáreas de tierra calma de la Campiña de Utrera (Sevilla), hasta donde se desplaza Tierra y mar, para conocer de cerca la situación.
Los campos recién segados se extienden silenciosos en el horizonte, hasta que la vieja cosechadora irrumpe en la escena y reanuda los trabajos de recolección. Tras la mala campaña del año pasado, debido a la sequía, la familia Prieto Carreño espera cosechar cerca de 600 toneladas de cereales, trigo duro y cebada, y 140 toneladas de leguminosas, garbanzos y lentejas. Otra apuesta ha sido la incorporación del uso del dron a sus prácticas agrícolas mejorando la producción y rentabilidad de sus cultivos.