El piragüista, doble medallista olímpico, está en la capital hispalense junto al gran campeón Saúl Craviotto y las jóvenes promesas andaluzas de este deporte.
Como cada año ocurre en enero, Sevilla es el lugar elegido por la selección española de piragüismo para preparar la temporada. Y en aguas del Guadalquivir coinciden, estos días, el último abanderado Olímpico, Saúl Craviotto y el próximo en los Juegos de París 2024, Marcus Cooper se ve portando la bandera de España si, como ha ocurrido hasta ahora, "se tira de lista por méritos".
Y a pesar de haber nacido en Reino Unido y no ser de padres españoles siente a España por encima de todo porque "desde muy pequeño llegué a Mallorca y con 12 años empecé a competir y nunca he pensado hacerlo por Inglaterra porque todos, mis entrenadores, clubes y resultados se los debo a España". Las sensaciones se acrecientan cuando "Saúl Craviotto me cuenta lo emocionante que es".
Pero este doble medallista olímpico con un oro en Río y una plata en Tokio no piensa ir a París solo a portar la bandera, sino que asegura que "me veo volviendo con dos medallas y a ver si las dos son de oro".