Fiñana y Gérgal restringen el uso de agua

La sequía y las altas temperaturas han llevado a los ayuntamiento de Fiñana y Gérgal, en Almería, a emitir bandos para que sus vecinos racionen el agua. En la primera, prohíben baldear, lavar vehículos y llenar piscinas, regar hortalizas y cualquier otro uso que no sea estrictamente doméstico. El río de Fiñán, que les abastece, lleva ya sin agua más de dos semanas y no llega a donde se almacena, la Pantaneta. Todo para evitar cortes antes de la estación de lluvias.

De momento no se van a programar cortes nocturnos, pero si la situación sigue así se verán obligados a ello. La Pantaneta está dos metros por debajo del límite habitual en esta época del año, como explica Rafael Montes, alcalde de Fiñana.

Muchas fuentes de la Sierra, por primera vez en la historia, se han secado. Y el río solo tiene agua en su nacimiento, aguas abajo se ha secado. Los vecinos preocupados porque huertos se secan. En Gérgal el agua sale turbia en varias pedanías y hay que abastecer con cubas, como explica Antonia Contreras, alcaldesa de este municipio. De seguir la situación no descartan que los cortes nocturnos lleguen a finales de mes.