Paco López se juega su crédito ante el Oviedo
El Cádiz es vigésimo, está en descenso y aún no ha sido capaz de ganar en su campo, lo que ha puesto a su técnico en una situación límite y a su afición convocando una protesta en los prolegómenos del partido.
El técnico cadista Paco López es veterano en estas lides y sabe que una derrota le pondría muy difícil su continuidad en el puesto. Se confió en él por el reciente ascenso a Primera con el Granada, pero la temporada no ha comenzado como para pensar en ese objetivo aunque quede muchísimo y haya potencial para lograrlo.
Con apenas diez puntos en once jornadas y sin haberle dado una alegría a su afición en forma de victoria, la situación del equipo es límite: vigésimo clasificado y apenas ha cosechado un punto de los últimos 15 posibles.
El cadismo se teme lo peor y hace tiempo que viene mostrando su disconformidad con la junta directiva presidida por Manuel Vizcaíno, que no fue capaz de conformar un equipo para mantenerse en primera tras varios años salvándose en la última jornada y que ahora en vez de hacia arriba mira peligrosamente al desastre de Primera Federación.
Por este motivo, el colectivo Brigadas Amarillas, el grupo ultra del Cádiz, al que se ha sumado la plataforma Alma Cadista, ha convocado una protesta en los prolegómenos del partido. Habrá una concentración una hora y cuarto antes del choque que derivará en una marcha hasta los bajos de Tribuna del Estadio Carranza para protestar por la actual situación del club.
El Oviedo, por su parte, quiere pescar en río revuelto pero su entrenador, Javi Calleja no se fía de la debilidad del Cádiz y así ha aleccionado a sus jugadores. El míster del equipo carbayón no podrá contar en Cádiz con David Costas, Carlos Pomares, Dotor, Seoane y Paulino de la Fuente, pero sí entran en la convocatoria Oier Luengo y Quentin Braat.
