Una escuela rural de hace cien años en Castellar
El museo de la localidad jiennense ofrece una recreación de cómo era la clase de una escuela rural a mediados del siglo pasado.
Hace cien años las escuelas no tenían pizarra electrónica, ni ordenadores, ni micrófonos inalámbricos. El Museo Histórico de Castellar, en Jaén, ofrece la recreación de la clase de una escuela para no olvidar cómo eran las aulas en los colegios entre los años 40 y 70 del siglo pasado.
Se trata de toda una lección de nostalgia en la que no faltan los cuadernos de caligrafía, la escuadra o el cartabón. La escuela rural ha desaparecido, pero nunca se olvida. Según Lucas Rubio, técnico municipal de Cultura del Ayuntamiento castellariego, su aspecto y sus elementos característicos son cosas que los más jóvenes difícilmente pueden imaginar.
Todavía son muchas las personas que recuerdan los pupitres, el globo terráqueo o la campana para llamar al orden. Castellar ha reunido este patrimonio, que recuerda al alumnado y al profesorado que ocupó unas aulas que durante 400 años apenas cambiaron de aspecto. Un reclamo más que turístico para viajar a través del tiempo.
