Dolorosas concentraciones diarias interrumpidas por los mensajes de familiares que entran en combate.
Los ciudadanos ucranianos dan las gracias a los españoles por su respuesta de condena de la guerra
"Ucrania por encima de todo". Es el grito desesperado de los ucranianos en Málaga. Cientos de personas han acompañado a esta comunidad que vive con angustia cada noticia que llega de su tierra. Algunas duras, cuando se enteran de familiares que ya luchan cuerpo a cuerpo, o de los sobre los que no hay noticias. Y orgullosos del apoyo que están recibiendo del pueblo andaluz.
'Los pueblos quieren paz', 'No a la guerra', 'No to war', 'Ucrania no es Rusia', 'Ucrania, el mundo está contigo', 'La paz para Ucrania. Rusos contra la guerra' y proclamas contra el presidente ruso, Vladimir Putin, son algunas de las pancartas que este domingo se han podido ver, de nuevo, en la plaza de la Marina de Málaga capital donde cientos de personas han exigido el fin del ataque ordenado por Rusia contra Ucrania en la madrugada del pasado jueves, 24 de febrero.
Desde entonces, los testimonios de preocupación son constantes en una provincia con más de 11.500 ucranianos censados, más de 4.000 en la capital malagueña, que se está volcando con ayuda humanitaria para los afectados por la invasión rusa. Muchos tienen allí a sus familiares: padres, madres, tíos, hermanos, hijos.
En la concentración, representantes de los ciudadanos ucranianos que residen en Málaga también han dado las gracias a los españoles por su respuesta de condena de la guerra "que ha desatado el psicópata de Putin" y cómo desde "el primer minuto" están colaborando: "Gracias por no quedarse indiferente" y por involucrarse "cada uno a su medida". También han recalcado que todo es "una ficción, una mentira" del mandatario ruso.
La comunidad ucraniana en Málaga, al igual que en el resto del país, se está movilizando solicitando a la ciudadanía medicamentos para primeros auxilios (vendas, yodo, pomadas analgésicas, para quemaduras, analgésicos, botiquines), pilas, mantas, generadores, linternas, productos de higiene personal, colchonetas, botas militares, motosierras de gasolina, así como chocolate, frutos secos y barritas energéticas, alimentos no perecederos, entre otros, para enviarlos hasta su país.
Algunos de los lugares en los que se puede dejar los materiales para colaborar son en el aparcamiento de caravanas Costa Golf, enfrente de Leroy Merlin en Málaga capital, desde las 10.00 horas; en un mini supermercado en el número 12 de calle Salitre; en la tienda solidaria Piel de Mariposa, en calle Héroe de Sostoa, 80; así como a las asociaciones Prosvita y Maydan Málaga y en los comercios ucranianos situados cerca de El Corte Inglés y en la barriada de Huelin de la ciudad. En otros puntos de la provincia también hay una corriente de solidaridad ante el ataque de Putin.
Hasta el momento ya se han enviado desde Málaga dos furgonetas cargadas de ayuda humanitaria y una tercera lo hará en breve. Solidaridad con el pueblo ucraniano desde la comunidad en la provincia y de parte de muchos malagueños que están también colaborando y apoyando al pueblo ucraniano.
Esto se suma a la ayuda trasladada por el Ayuntamiento de Málaga capital y la Diputación para prestar toda la ayuda posible al pueblo ucraniano. El alcalde, Francisco de la Torre, ha recordado el ofrecimiento para acoger a refugiados, además de colaborar con esta comunidad en el envío de alimentos y material sanitario a su país, animando a la colaboración ciudadana: "Demostremos solidaridad".
Por su parte, el presidente de la institución provincial, Francisco Salado, ya ha trasladado a la cónsul de Ucrania en Málaga la disposición de las residencias de La Térmica y La Noria, con más de medio centenar de plazas, para alojamiento y manutención de los ciudadanos ucranianos a los que la invasión rusa cogió en Málaga bien de visita o de turismo y que ahora no pueden o no quieren regresar, así como para atender a refugiados y niños a los que haya que evacuar.
El 'No a la guerra' también se ha oído en Córdoba. Unas 500 personas se han manifestado en la plaza de las Tendillas para exigir el fin de la invasión rusa de Ucrania. Estos ucranianos residentes en Córdoba aseguran que lo están pasando muy mal y creen que en Rusia nadie quiere la guerra salvo Vladimir Putin. Y el ayuntamiento se ha ofrecido para acoger refugiados ucranianos que huyan del conflicto bélico.
En Sevilla las banderas ucranianas y las pancartas por la paz y contra Putin han invadido la Plaza Nueva. 300 personas se han concentrado para pedir que cese la violencia en Ucrania.