El lateral zurdo titular de la selección ha sido esta jornada la voz de un vestuario unido frente a los rutilantes nombres de la Francia de Mbappé, Griezmann, Tchouameni o Camavinga.
Ya estamos en esa tensa cuenta atrás para la semifinal del martes con Francia, aunque se intenta disimular. Ayuda alguna visita a la concentración y la última ha sido la de Iker Casillas, que se ha reencontrado con el único superviviente del Mundial de Sudáfrica, el andaluz Jesús Navas.
La baja por sanción de Carvajal sitúa al lateral de Los Palacios en el equipo que se verá con los franceses y eso incluye colisionar con Mbappé, aunque el francés no anda cómodo desde que se rompiese la nariz en la fase de grupos y se vea obligado a llevar una máscara que apenas le deja respirar y le llevó a pedir el cambio en los cuartos de final ante Portugal.
España ha vuelto al césped para preparar su desafío, que ojalá sea el penúltimo de esta Eurocopa. A la novedad de Navas habrá que añadir la de Nacho que pese a sus continuos problemas físicos en esta Euro se perfila como el sustituto del sancionado Le Normand.
La voz a las sensaciones de la selección la ha puesto en esta jornada Cucurella quien ha dicho al respecto de las rutilantes estrellas de Francia que "es más valioso tener un gran equipo, ser mejores como conjunto", que "tener superestrellas o nombres punteros". De hecho, ha insistido en que "hemos creado un grupo muy bueno, y en estos torneos vale más un equipo, vale más tener una familia, que los 26 estemos unidos. A lo mejor no tenemos esos nombres punteros o esas superestrellas, pero como equipo somos muy buenos, hacemos un buen fútbol y hasta ahora nos está yendo muy bien".
Sin embargo, incluso después de eliminar a la anfitriona Alemania, el lateral evita dar el favoritismo a la selección, porque eso "es un poco más el tema de la prensa. A nivel futbolístico todas las selecciones siempre respetan a España. Pero el venir un poco como tapados nos ha ayudado porque muy poca gente daba algo por nosotros y eso nos hizo empezar con confianza, sintiéndonos a gusto sin nada que perder. Sabía que teníamos un gran equipo y se ha demostrado", explicó.
Cucurella también ha tenido un recado para Alemania después de las quejas de su seleccionador por una mano del lateral en la prórroga que el colegiado no entendió como penalti pero que pudo ser decisiva. Una acción que el lateral vivió "más tranquilo" cuando vio al árbitro decir "rápido" que no era nada. "Si los expertos arbitrales han dicho que no es mano, pues no es mano y ya está", sentenció. "Es una acción un poco dudosa, estamos cansados de ver manos, que unas sí y unas no, pero creo que si Alemania hubiese ganado, no se estaría hablando de eso. Son cosas que pasan, son decisiones, también nosotros nos podríamos haber quejado de que a Kroos le tendrían que haber expulsado antes. Estuvimos más acertados que ellos, pudimos marcar un gol más que ellos y hemos pasado de ronda", manifestó contundente.