El fango de nueve días convierte las calles en ciénagas
El fango es un nuevo problema -y serio- en los núcleos de población castigados por la DANA. Urge despejar el lodo y los montones de basura para evitar que las condiciones de salubridad empeoren
La imagen de Paiporta es desoladora, nueve días más tarde. El fango es un nuevo problema -y serio- en los núcleos de población castigados por la DANA. Atasca las alcantarillas y está convirtiendo las calles en ciénagas. La limpieza se complica. Urge despejar el lodo y los montones de basura para evitar que las condiciones de salubridad empeoren. Se cuentan ya 9 días, en Paiporta, la zona cero de la tragedia. Aún continúan las labores para retirar el lodo y los desperdicios arrastrados por la riada, y ahora se les suma ahora el problema del alcantarillado atascado por el fango, con todo los problemas para la salud que esa situación representa.
Desde el barranco del Poyo, donde el puente sigue arrancado por la riada, conseguir medicamentos o comida caliente suponen grandes retos diarios para sus vecinos, que sacan fuerza gracias a toda la ayuda que les llega. Se sigue vaciando los bajos y los aparcamientos. Aunque ahora el problema es un alcantarillado atascado por el lodo. Una dificultad para cruzar sus calles y un fuerte olor a ácido, supone una amenaza para su salud. Reconocen que se han dado algunos pasos gracias a los los trabajos de voluntarios, la policía y el ejército.
Saben que la tragedia no termina limpiando el barro, pero los mantiene aferrados al objetivo de recuperar parte de su vida, aunque todavía quede para ello un largo camino.
