El opositor venezolano llegará a Madrid en un avión del Ejército. Fue el principal rival de Maduro en las elecciones de julio en Venezuela
El Gobierno español se reafirma en no reconocer la victoria de Maduro y en apostar por el diálogo tras acoger a Edmundo González. Borrell: "Hoy es un día triste para la democracia en Venezuela"
González Urrutia estuvo alojado en secreto en la embajada neerlandesa en Caracas durante más de un mes tras las votaciones
Edmundo González acaba de llegar a España después de recibir asilo político. El opositor venezolano ha volado desde Caracas en un avión de las Fuerzas Armadas. La justicia chavista perseguía a Edmundo González por cinco supuestos delitos al no aceptar los resultados electorales oficiales, cuestionados por la diplomacia internacional. Maduro aún no ha presentado las actas de las elecciones celebradas en julio. El líder ahora exiliado estuvo alojado en secreto en la embajada neerlandesa en Caracas durante más de un mes, tras las votaciones.
Edmundo Gonzalez Urrutia, 75 años, antiguo diplomático, fue el principal rival del presiente Nicolas Maduro en las eleccines del pasado 28 de julio en Venezuela. Sobre Edmundo González pesa una orden de arresto a instancias de la Fiscalía al no presentarse a tres citaciones para declarar sobre la pubilicación en internet de las actas elelctorales que acreditarían la derrota de Maduro.
La operación diplomática que ha desembocado en el asilo a Edmundo González lleva en marcha dos semanas en las que ha estado refugiado en la residencia del embajador español en Caracas, después de que Maduro dictara una orden de detención contra él por negarse a reconocer los resultados electorales. Este sábado, el presidente Pedro Sánchez, en el Comité Federal del PSOE, tildó de “héroe” a Edmundo y aseguró que España no lo iba a abandonar.
La acogida del candidato opositor Edmundo González, a quien España va a dar asilo a petición propia, no cambia la postura del Gobierno de no reconocer la "supuesta victoria" de Nicolás Maduro en las presidenciales del 28 de julio mientras no se presenten las actas y de apostar por el diálogo entre venezolanos para encontrar una solución. Así lo ha trasladado el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, en declaraciones a los medios que acompañan al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su viaje a China.
Albares ha confirmado la salida de Venezuela de Edmundo González en un avión de la Fuerza Aérea española tras permanecer "un tiempo en la residencia de la Embajada de España" en Caracas y ha indicado que el dirigente opositor "ha solicitado también acogerse al derecho de asilo que, por supuesto, el Gobierno de España va a tramitar y conceder". El ministro ha podido hablar con el candidato opositor, quien le "ha trasladado su agradecimiento hacia el Gobierno y hacia España", mientras que él le ha reiterado "el compromiso del Gobierno de España con los derechos políticos, la libertad de expresión y manifestación y la integridad física de todos los venezolanos".
"La posición del Gobierno de España no cambia en absoluto con respecto a lo que era anteriormente a la salida de Edmundo González", ha recalcado Albares, según las declaraciones facilitadas desde su departamento. Así, ha vuelto a exigir la publicación de todas las actas electorales para su verificación y ha recalcado que el Gobierno no va a reconocer "ninguna supuesta victoria si eso no se puede hacer". Igualmente, ha puntualizado que "España va a estar siempre ahí para favorecer el diálogo y la negociación entre el Gobierno y la oposición para conseguir una salida que tiene que ser pacífica y genuinamente venezolana entre venezolanos".
En cuanto a la eventual reacción del Gobierno venezolano, el ministro ha insistido en que el Ejecutivo ha dejado muy claro que todo lo que hace es "en favor de Venezuela y del pueblo venezolano", de ahí la apuesta por el diálogo entre las partes.
Por último, Albares no ha descartado que otros opositores venezolanos puedan seguir los pasos de Edmundo González. "España no va a cerrar la puerta nunca a ningún venezolano", ha subrayado, recordando que ya hay más de 100.000 acogidos con un estatuto especial.
Por parte del chavismo ha sido la vicepresidenta Delcy Rodríguez quien hizo pública la marcha del opositor en redes sociales y aseguró que Venezuela había concedido los “debidos salvoconductos” en aras “de la tranquilidad y la paz política del país”.
Las autoridades de Venezuela concedieron el salvoconducto al opositor después de haber mantenido los "contactos pertinentes" con el Gobierno Español y, "una vez cumplidos los extremos del caso y en apego a la legalidad internacional", se le concedió el "debido" salvoconducto al opositor para poder abandonar la sede diplomática y viajar hacia territorio español. La representante venezolana ha defendido que esta actuación "reafirma el respeto" de las autoridades venezolanas "por el Derecho" internacional.
El Alto Representante de la UE en Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha dicho que "hoy es un día triste para la democracia en Venezuela y ha confirmado que Edmundo González fue acogido por la embajada de los Países Bajos en Venezuela hasta el pasado 5 de septiembre y que posteriormente pidió asilo político en España".
También el vicesecretario de Política Institucional del PP, Esteban González Pons, dice que sacar a Edmundo González de Venezuela sin reconocerlo presidente legítimo "no es hacerle un favor a la democracia sino quitarle un problema a la dictadura". Por su parte,la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, critica lo apresurado de este asilo y lamenta que llevemos un año sin romper relaciones diplomáticas con Israel.
Las fuerzas de seguridad venezolanas rodean la embajada argentina en Caracas, donde se refugian seis opositores a Nicolás Maduro. Denuncian que el asedio policial bloquea la entrada al edificio. Además han cortado la electricidad. Brasil está a cargo de la embajada argentina tras la expulsión de sus diplomáticos, pero Venezuela ha revocado esa protección, lo que ha desembocado en un conflicto entre los tres países. Lula Da Silva advierte que la misión es inviolable.