La causa abierta se basa en sus cartas de apoyo a una empresa que recibió adjudicaciones públicas, su presunta relación con un propietario de Air Europa, rescatada por el Gobierno, y la presunta negociación con Indra y Telefónica para un software para su máster
Son tres las líneas que cimentan la investigación a Begoña Gómez. La primera de ellas, a raíz de la denuncia del sindicato Manos Limpias y vinculada a las cartas desveladas por el digital El Confidencial en las que la mujer de Pedro Sánchez daba su apoyo en 2020 a una empresa de Juan Carlos Barrabés, que concurrió posteriormente a un concurso del ente público Red.es, dependiente del Ministerio para la Transición Digital. Barrabés, que participó en el diseño del máster en la Universidad Complutense que dirigió Begoña Gómez, obtuvo adjudicaciones de Red.es por valor de 10 millones de euros.
La segunda línea de investigación tiene que ver con la presunta relación entre la investigada y el rescate estatal por valor de 475 millones de euros de la aerolínea Air Europa, perteneciente al grupo Globalia, propiedad a su vez del empresario Javier Hidalgo, que aportó diez meses antes 40.000 euros anuales al centro de estudios dirigido por la esposa de Sánchez. La Fiscalía se opuso desde el principio a que el juez Juan Carlos Peinado, que instruye la causa contra Gómez, investigara también ese rescate de Air Europa.
Y la tercera línea apunta a la presunta negociación de la mujer de Sánchez con las empresas Indra y Telefónica, participadas por el Ministerio de Hacienda, y Google para la realización de un software gratis para su máster en la Complutense.
De esta investigación se excluye la adjudicación de varios contratos a Juan Carlos Barrabés por parte de la entidad pública Red.es porque de ella se ha hecho cargo la Fiscalía Europea dado que se financiaron con fondos comunitarios.]]