Numerosas personas indignadas han recibido con insultos a la comitiva y se han encarado con ella, mientras que tanto el rey como la reina ha intentado mediar con jóvenes que se les han acercado. Los monarcas finalmente han suspendido la visita.
El presidente del Gobierno fue evacuado por sus guardaespaldas. Los vecinos lo persiguieron y la emprendieron con palos y piedras que lanzaron a su vehículo oficial, un todoterreno negro, mientras se escuchaban gritos de "dimisión"
El 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, ha asegurado comprender la "indignación social"
Gritos de 'fuera', así como lanzamiento de barro ha recibido a la comitiva de los reyes de España, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el president de la Generalitat, Carlos Mazón, a su llegada al centro de Paiporta. Numerosas personas indignadas han recibido con insultos a la comitiva y se han encarado con ella, mientras que tanto el rey como la reina ha intentado mediar con jóvenes que se les han acercado. Con la cara manchada de barro, igual que su abrigo, el rey ha seguido avanzando por una de las calles principales de esta localidad de la zona cero de la dana y ha tratado de tranquilizar a varios de los voluntarios, muy alterados tras cinco días de desastre por la riada. La reina también ha dialogado con algunos de los indignados, mientras que seguían los gritos de 'fuera, fuera' y algunos insultos dirigidos a todas las autoridades.
Los reyes, Pedro Sánchez y Carlos Mazón han llegado a la arteria principal de Paiporta sobre las 13.00 horas de este domingo. Al menos lo han intentado, porque poco antes de pisar la calle Mestre Palau los vecinos de la localidad se han lanzado en turba sobre ellos, tirándoles barro al grito de “asesinos”. Los escoltas han actuado rápidamente creando un cordón de seguridad en torno a los visitantes reales, que han tratado de protegerse del lodo y los objetos que les lanzaban abriendo paraguas sobre sus cabezas y replegándose ante un ambiente fuertemente marcado por la tensión y la rabia.
Sin embargo, el barro ha acabado manchando la cara del rey Felipe VI y una pala ha ido dirigida a la espalda del presidente del Gobierno, que rápidamente ha sido evacuado por el protocolo de seguridad. Además, uno de los escoltas de los reyes ha acabado con una brecha en la cabeza.
La reina Leticia, unos pasos más atrás, se secaba lágrimas mientras algunas mujeres le aseguraban que esto “no es por usted”. “Tres días para que llegue el ejército, no tenemos ropa, no tenemos comida, no tenemos nada”, han esgrimido dos mujeres a la reina, a quien han asegurado que “nos están mintiendo”, a lo que ella, visiblemente superada por la situación, les ha confesado que “tenéis razón”.
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, aguardaba tras el monarca con perfil bajo y cara seria, escuchando los cánticos que le pedían su dimisión. “Traed una pala”, “que se manchen”, gritaba la torva de personas que trataban de zafarse constantemente del cordón de seguridad para llegar lo más cerca posible. En menos de dos minutos los vecinos han acorralado a la comitiva formando un círculo a su alrededor y cada vez que el rey trataba de seguir caminando hacia delante, muchos trataban de cortar el paso con palas en la mano. “¡Han muerto niños, no es como la pandemia que eran ancianos, niños!”, lloraba ante EFE un hombre. “Ahora ellos volverán a su casa a darse una ducha caliente y dormir en su cama”, se quejaba otro. Ante el ambiente cada vez más hostil han hecho su aparición cuatro agentes de la policía montada, que han despertado el nerviosismo de los presentes debido a la actitud revoltosa de los caballos.
Tras casi media hora, la comitiva ha decidido replegarse y encaminarse hacia los vehículos que aguardaban unos metros atrás. Mazón se ha introducido dentro de uno de los coches y la reina ha hecho lo propio en otro vehículo.
El rey ha llegado a sentarse en la parte de atrás del suyo, pero a los pocos segundos ha cambiado de opinión y ha indicado que quería acercarse a hablar con vecinos. Entre gritos de “borbón, defiende a tu nación”, Felipe VI se ha encaminado rodeado por un equipo de escoltas, guardias civiles y policías que sumaba alrededor de medio centenar de efectivos y señalaba a la persona con la que quería hablar -aquellos que lloraban desconsoladamente pero también los que le insultaban con saña- y su jefe de seguridad los hacía pasar dentro del cordón para que se desahogaran.
“¿Por qué no han venido antes?”, lloraba una mujer cogiéndole la mano. “¡Desplegad al ejército!”, le exigía un joven que segundos antes había estado acusando al monarca de tener las manos “manchadas de sangre”. Para la mayoría, la comitiva real ha venido solamente a “hacerse la foto”, mientras a ellos los tienen “abandonados”.
Felipe VI ha escuchado pacientemente al menos a una decena de vecinos, a los que repetía fórmulas como “lo entiendo” o “hacemos todo lo que podemos hacer”. “¿Y Sánchez dónde está? El rey está dando la cara”, ha preguntado uno de los presentes a los periodistas. La mayoría de los que han hablado con don Felipe han salido del cordón de seguridad llorando, mientras parte de los allí presentes les criticaban por escuchar al monarca: “¡no os creáis nada, os está utilizando!”, gritaban.
Tras sus audiencias improvisadas, Felipe VI se ha encaminado hacia su coche, donde, antes de entrar, ha juntado sus manos en señal de perdón a un pueblo que este domingo ha escenificado la indignación que siente hacia unas autoridades que, para ellos, llevan casi una semana ausentes.
SÁNCHEZ, EVACUADO.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fue evacuado por sus guardaespaldas de la comitiva que acompañaba a los reyes de la zona cero de la tragedia. Los vecinos lo persiguieron y la emprendieron con palos y piedras que lanzaron a su vehículo oficial, un todoterreno negro, mientras se escuchaban gritos de "dimisión". La evacuación del presidente en su coche oficial ha sido muy tensa. Un grupo de vecinos ha perseguido al equipo de seguridad del presidente durante su evacuación y le ha hecho frente mientras Sánchez intentaba subir.
Una vez a salvo, los vecinos la han emprendido con palos y piedras contra el capó y los cristales del coche. Los dos vehículos de la comitiva presidencial han recibido golpes y uno de ellos ha acabado con las lunas reventadas. Tanto el presidente del Gobierno como el de la Generalitat, Carlos Mazón, se han convertido en el objetivo de la ira contenida durante estos cinco trágicos días de los vecinos de Paiporta. Ambos han sido recibido abucheos y gritos de "dimisión" y "asesinos".
Tal como puede observarse en varios vídeos, el equipo de Sánchez ha sido quien ha tomado la decisión de sacarlo de la comitiva al evaluar el riesgo que sufría el presidente dada la gravedad de los disturbios y los objetos lanzados contra la comitiva. De hecho, durante su retirada a un punto seguro, un palo lanzado por la muchedumbre ha golpeado a uno de sus guardaespaldas.
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Tras los incidentes en Paiporta, los monarcas han suspendido la visita a Chiva. “El pueblo unido jamás será vencido”, han gritado varias de las personas que esperaban a la comitiva y se han quejado de la “cobardía” de las autoridades por no acudir. Los congregados en una de las calles principales de Chiva han seguido después aplaudiendo los tractores y voluntarios que se dirigían a seguir con las labores de reconstrucción de esta localidad, una de las más afectadas por la dana, tras saberse que se suspendía la visita.
En Chiva hay al menos siete fallecidos tras el paso de la dana, varios desaparecidos y múltiples daños materiales, entre ellos varios puentes, guardarraíles arrastrados y muchos troncos de árboles cortados de raíz y atascados en diversos puntos de los alrededores del pueblo. Fuentes de Zarzuela han informado que la visita a Chiva quedaba aplazada "por acuerdo conjunto de las autoridades estatales, autonómicas y de la Casa Real". La suspensión de la visita a Chiva se produce después de los incidentes ocurridos en Paiporta, donde la comitiva de los reyes, Sánchez y Mazón fue increpada por numerosas personas, que llegaron a lanzar barro.
El 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, ha asegurado comprender la "indignación social" ante los efectos de la DANA en la provincia de Valencia y ha subrayado que su "obligación política y moral" es quedarse "a recibirla". "Entiendo la indignación social y por supuesto me quedo a recibirla. Es mi obligación política y moral. La actitud del Rey esta mañana ha sido ejemplar", ha manifestado en redes sociales tras los altercados que se han producido durante la visita de las autoridades a Paiporta (Valencia), considerada 'zona cero' del temporal en la provincia.
Mazón ha escrito estas palabras después de que decenas de personas hayan recibido con insultos, gritos y lanzamiento de objetos a la comitiva que se ha desplazado a Paiporta, encabezada por los reyes Felipe VI y Letizia.
Los reyes de España, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, tenían previsto reunirse en el Centro de Emergencias de la Generalitat, en l'Eliana (Valencia), donde está activado el Centro de Coordinación Operativo Integrado (Cecopi).
Además, el Rey tiene previsto este lunes por la mañana presidir en el Cuartel General de la UME en la Base Aérea de Torrejón, en Madrid, la reunión del Comité de crisis para el seguimiento de los efectos de la DANA.
Felipe VI y Letizia han suspendido toda la agenda de otras actividades previstas para la próxima semana. Los monarcas han hablado por teléfono en los últimos días con los alcaldes de poblaciones afectadas por la DANA, las valencianas de Chiva, Catarroja, Torrent, Algemesí, Utiel, Paiporta y Sedaví, y la albaceteña de Letur para trasladarles su sentimiento de pesar por las pérdidas humanas y materiales en sus municipios.