El Monasterio de La Cartuja albergará cuatro propuestas diferentes de la Bienal

Redacción 1 agosto 2024

El Monasterio de La Cartuja regresa como escenario de La Bienal en su XXIII edición para albergar propuestas de cante y baile que ponen de manifiesto la posibilidad de interpretar la contemporaneidad del flamenco partiendo de diferentes ópticas, desde las más vanguardistas y experimentales a las más íntimas y sobrias. Serán cuatro los espectáculos que acogerá el Monasterio, en diferentes espacios dentro del mismo, protagonizados por figuras de este arte como María Moreno, La Tremendita y La Kaíta, Juan de Juan y José de la Tomasa.

La Bienal acude esta edición al Monasterio para “reflexionar en torno a la idea de contemporaneidad y sus vértices”, como detalla su director, Luis Ybarra. En este sentido, “vamos con distintas propuestas a diferentes puntos del recinto: tan contemporáneo es José de la Tomasa como La Tremendita con La Kaíta, que será un encuentro cuanto menos salvaje, o Juan de Juan como María Moreno”; en definitiva, “cuatro propuestas muy diferentes, pero todas ellas contemporáneas”.

Entre estas piezas se encuentran dos estrenos absolutos: “Matancera”, de La Tremendita y La Kaíta; y “66 palos”, de Juan de Juan. Además, dos de ellas, concretamente la firmada por María Moreno (“Verso libre”) y “Matancera” contarán con dos funciones, ya que a la habitual de las 21.00 h se suma una nueva representación a las 23.00 h en sus respectivas jornadas.

“Verso libre” de María Moreno será la primera pieza en pasar por el escenario del Monasterio de La Cartuja el 17 de septiembre. En esta ocasión, la bailaora, ya reconocida en La Bienal con el Giraldillo Revelación en 2018 y el Giraldillo al Momento Mágico en 2020 por el inicio de su soleá, regresa a esta cita para poner en escena una pieza en la que se detiene en el espacio sonoro del Monasterio para bailar a partir de lo que le devuelve. Raúl Cantizano con guitarra y samplers y Manuel Masaedo a la percusión harán sonar esta localización de manera genuina, evocando la memoria y contribuyendo a la lectura y la interpretación del espacio.

La bailaora, que declara sentirse “muy feliz por estar una edición más en La Bienal, que es el festival que más me ha acompañado y apoyado en mi carrera”, anuncia “muchas sorpresas” para los dos pases de este espectáculo, “creado únicamente para La Bienal” y que ya ha agotado las entradas.

También con las entradas agotadas y al igual que este primer espectáculo, la segunda de las noches (29 de septiembre) contará con otras dos funciones. Dibujado por la evolución del flamenco, La Tremendita y La Kaíta tienden un puente entre Badajoz y Triana en “Matancera”. La Bienal acogerá el estreno absoluto de esta propuesta protagonizada por dos cantaoras que se unen en un diálogo donde el cante viaja a través de diversas texturas sonoras, removiendo emociones profundas como lo hacen las matanceras en sus encuentros de matanzas. Dos cantaoras, dos generaciones, y una misma inquietud: la evolución del cante en todas sus formas.

“Es un privilegio y un honor poder mostrar mi evolución y mis inquietudes en La Bienal de Sevilla, el festival de flamenco más importante del mundo y de la ciudad que me vio nacer”, destaca La Tremendita, y añade “presentar mi trabajo en La Bienal es una manera de conectar mis raíces con mi desarrollo artístico, y es un reconocimiento que valoro profundamente”.

El baile de Juan de Juan tomará el relevo en el Monasterio de La Cartuja para brindar a la audiencia otro estreno absoluto, el de “66 palos”. Rodeado por un completo plantel de artistas, el bailaor sevillano llevará a los presentes a una travesía por los palos del flamenco, escogiendo de cada uno de ellos la melodía que lo distingue. Como él mismo explica, su baile “va vistiendo e interpretando cada palo y, tomando siempre como base el cante, las guitarras serán las que arropen con armonía rítmica y melódica este viaje en el que se podrán paladear los diferentes colores que tiene el flamenco”.

El broche a las citas en el Monasterio lo pondrá José de la Tomasa, reciente Giraldillo Internacional, la noche del 3 de octubre. “50 años con el cante” es el título del espectáculo que el cantaor de la sevillana calle Feria trae a La Bienal, escoltado por la guitarra siempre fiel y conmovedora de Antonio Carrión; un recital clásico en el que repasará su prolongada trayectoria y su forma de hacer en el cante. Heredero de una estirpe en la que figuran nombres como Pepe Torre, Manuel Torre, Tomasa Soto y Manuel Giorgio ‘Pies de plomo’, De la Tomasa afirma sentirse “como un centinela” de lo que ha vivido. “Llevo toda la vida rescatando el cante de mi gente y tratando de dar categoría a mi bandera flamenca”, señala.

 

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