La comparsa de Antonio Martínez Ares siempre es un rival a batir; más desde su regreso, pues ha conseguido el primer premio en cuatro de las siete agrupaciones que ha llevado al Falla. 'El niño de Santa María' presenta su alegoría a la rebeldía.
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La comparsa de Antonio Martínez Ares siempre es un rival a batir; pero desde su regreso en 2016 más aún, pues ha conseguido el primer premio en su modalidad en cuatro de las siete agrupaciones que ha llevado al Falla.
Antonio Martínez Ares lleva a 'La oveja negra' a lo más alto y consigue, por tercer año consecutivo, el primer premio en la modalidad de comparsas, en el 40 aniversario de su estreno en el concurso. Y es que el año pasado se lo llevó con 'La ciudad invisible' y en 2022 con 'Los sumisos'. Estuvo a punto de 'hacer historia' en los 90 con 'Los Miserables', 'La Ventolera' y 'El Brujo', pero esta última agrupación quedó en segunda posición, un año después volvería a lo más alto con 'La Trinchera'.
FINAL
El comparsista celebra este 2024 su 40 aniversario como autor. Y es que ya son 28 las comparsas que ha llevado al concurso, obteniendo muchos primeros premios, como el del pasado año con 'La ciudad invisible'.
Martínez Ares, un inmenso poeta en los pasodobles, levantará ampollas con el primero por la inesperada metáfora sobre Andalucía. El retrato desde todos los costados, es tan barroco y opulento como descarnado y descorazonador. El segundo es un imponente homenajes, de tú a tú, al desaparecido autor de comparsas y chirigotas, Juan Carlos Aragón.
Los cuplés son otro cantar, más mortales. Uno está dedicado a la sexualidad equívoca de quien no es lo que parece. El otro, al uso y abuso de la pildorita azul y vigorosa, por parte de la juventud.
SEMIFINALES
Martínez Ares presenta su alegoría a la rebeldía. Sus cuplés han estado dedicados en la primera función de semifinales al mundo del toreo, el pijerío y las mantillas denunciando la tortura animal. ‘Un circo romano’ han cantado estas ‘ovejas negras’ antitaurinas.
El pasodoble dedicado a la violencia vicaria ha levantado al Falla. Con gran maestría lo que aparentemente era una oda a la paternidad ha terminado con un final inesperado que nos ha recordado casos como el de José Bretón.
El compositor y letrista cumple cuarenta carnavales en esta edición exclamando ‘faltan ovejas negras, sobran borregos’. El público ha despedido con grandes ovaciones la actuación de la comparsa ‘La oveja negra’.
CUARTOS
Primer pasodoble para el lamento de una hija que, sola, debe cuidar de una madre que la tiene esclavizada. Ovación para el segundo pasodoble, parte cantado en catalán, en el que critican a Pedro Sánchez y la nueva Ley de Amnistía; además de a una Cataluña a la que no le preocupa nada España. Así que simplemente, “que amnistía y que cojones, no quieren ser español, que se abra ya el corral, y que se vayan y que se vayan”.
Cuplés al mundo de la cocina y al contínuo reinvento en el que está metido. El segundo, a los que critican la celebración del 12 de octubre y a Pedro Sánchez, para después seguir chupando del bote. Cierran con un popurrí con el que el autor siempre consigue lucir su verso, musicalidad y voces.