Lo ha asegurado el consejero de Turismo, Arturo Bernal, este miércoles en el Parlamento, donde ha destacado también, como tendencia, el crecimiento de las visitas a nuestra tierra fuera de la temporada alta de verano.
Bernal ha precisado que no se pierden turistas en lo que va de año, sino que "se distribuyen mejor" en otros meses, lo que ha permitido un verano "exento de tensión".
La demanda internacional gana sitio, mientras baja la nacional.
Andalucía ha recibido este verano menos turistas, pero los que han venido se han quedado más tiempo y han gastado más. Lo ha asegurado el consejero de Turismo, Arturo Bernal, este miércoles en el Parlamento, donde ha destacado también, como tendencia, el crecimiento de las visitas a nuestra tierra fuera de la temporada alta de verano. En concreto, Andalucía incrementó un 0,5 % sus pernoctaciones hoteleras este verano sumando julio y agosto respecto al mismo periodo del año anterior, hasta situarse en 14,1 millones, mientras que ha descendido en el conjunto de esos meses un 3,5 % el volumen de viajeros, que ha sido de 4,2 millones.
Bernal ha precisado que no se pierden turistas en lo que va de año, sino que "se distribuyen mejor" en otros meses, lo que ha permitido un verano "exento de tensión". "Menos turistas que pernoctan más", lo que conlleva más riqueza y empleo, ha resumido, además de destacar los buenos resultados en retos como la desestacionalización de la demanda y una mayor distribución turística por el territorio. Prevé que 2024 concluya con un crecimiento moderado en el volumen de turistas del 3 %, mientras se crece un 3,5 % en empleo o un 5 % en ingresos.
Andalucía recibió hasta agosto 9,3 millones de turistas extranjeros que dejaron un gasto de 12.600 millones de euros, 2.200 más que en el mismo periodo del año pasado. Bernal ha resaltado que el modelo turístico del Gobierno andaluz "funciona porque se crece más en empleo y en ingresos que en turistas", lo que califica de "gran resultado" respecto al impacto social del turismo, y se ha referido a las "buenas noticias" en cuanto a estacionalidad, con una mejor distribución turística en el territorio y en el tiempo, y también respecto a ingresos.
"Se ha crecido moderadamente en el turismo en los meses de más crecimiento y más en los de temporada baja", ha incidido, para añadir que "se crece más en las pernoctaciones, los turistas están más tiempo y gastan más; hay mayores rendimientos, pero menor impacto".
Respecto a la demanda internacional, ha señalado que gana sitio, mientras baja la nacional. El consejero ha destacado a Portugal y Estados Unidos como principales emisores en verano junto a Italia, a Jaén como una de las provincias con mayores tasas de crecimiento y tambié na Granada y que el trasvase de público del litoral al interior aporta nuevos usuarios a esos entornos.
En cuanto a los alojamientos extrahoteleros, ha señalado una reducción de visitantes en julio del 4 %, pero un incremento de pernoctaciones del 3 %, panorama similar al que se ha producido en cuanto a las magnitudes hoteleras. Arturo Bernal ha aludido al crecimiento de viajeros en el interior del 5,3 % entre enero y agosto, mientras que en el litoral ha sido del 2,3 %, y al aumento de pernoctaciones en zonas interiores del 7,2 % frente al 5,6 % de las áreas costeras.
También ha resaltado la evolución de la tasa de temporalidad en el empleo del sector de un 40 % en 2019 a un 13,5 % en el periodo de julio y agosto de este año.
Por su parte, la socialista Isabel Aguilera ha reclamado al consejero que no siga "de perfil" ante asuntos como la tasa turística o la regulación de los pisos turísticos, algo que han compartido los grupos de la izquierda. Aguilera ha defendido que el verdadero desafío no es que lleguen más turistas ni que gasten más, sino gestionar "de manera más inteligente y sostenible" ese flujo de personas, además de que el turismo no beneficie "sólo a unos pocos".
El parlamentario de Vox Antonio Sevilla ha centrado gran parte de su discurso en el rechazo a una tasa turística, que cree que puede servir para "pagar la fiesta" a los alcaldes, y ha pedido que no "sacrifique ni condene" al turismo por ello, además de reclamarle que se aleje de "las teorías de la izquierda" que hablan de "turismo de masas o daño ecológico".
La portavoz adjunta de Por Andalucía, Esperanza Gómez, ha criticado que se vaya "vendiendo" a Andalucía como un "comercial" en grandes ferias sin importar sus consecuencias y ha calificado de "obsceno" que se piense en el número de turistas y en su gasto, cuando el 45 % "no puede permitirse ni una semana".
Por su parte, la diputada de Adelante Maribel Mora ha cuestionado el impacto del turismo en las zonas más masificadas y el "coste social" que tiene en el acceso a la vivienda, ante lo que ha preguntado "para cuándo el derecho a la vivienda digna de los andaluces".