El virgen extra se encuentra ya por debajo de los 4 euros.
Los consumidores esperan a ver traducida esa bajada en los comercios, mientras que hay preocupación entre los agricultores.
Drástica caída del precio del aceite de oliva en origen. El virgen extra se encuentra ya por debajo de los 4 euros, en concreto ha llegado a los 3,48 euros el litro.
Es decir, casi un 40 por ciento menos que en las mismas fechas el año pasado y a punto de llegar al coste de producción en el caso del olivar de secano, mayoritario en zonas como la provincia de Córdoba.
Es algo impensable hace unos meses y cuando hace un año se vendía a 8 euros y medio el kilo. La caída preocupa mucho a las organizaciones agrarias, que piden precios razonables para todas las partes; mientras, los consumidores esperan a ver traducida esa bajada de precio en los comercios.
El aceite de oliva ha pasado de ser un producto considerado un lujo en los últimos años a sufrir esta reducción significativa en su precio en poco tiempo.
Los agricultores achacan este abaratamiento a la ley de la oferta y la demanda: a una mayor oferta, por una producción más abundante, y menor demanda; también a las prisas de algunos productores por vender rápido. Así lo explica Rafael Navas, secretario provincial de Asaja en Córdoba.
Consideran que la cosecha de este año es media en cuanto a cantidad, pero con rendimientos bajos debido a la falta de lluvias recientes. Además, es necesario abastecer al mercado mundial, cuya producción es reducida, y para ello son los productores españoles los que deben luchar por unos precios razonables, según Miguel Cobos, secretario general de UPA en Córdoba.
El precio del aceite de oliva virgen extra ha ido subiendo continuamente desde julio de 2020 hasta enero de este año, cuando alcanzó casi los 9 euros por litro en origen. Durante este año la bajada ha sido de un 40 %.