Los regantes de Córdoba piden más balsas para no perder ni una gota de lluvia
Las comunidades de regantes y la Confederación Hidrográfica apuestan por construir más depósitos para el riego como solución a medio plazo al déficit que sufre la cuenca del Guadalquivir.
Con toda la provincia de Córdoba en aviso amarillo por lluvias este martes, con acumulados de hasta 40 litros por metro cuadrado en 12 horas, los agricultores dan la bienvenida a unas precipitaciones que no solo van a empapar el campo, sino que aumentarán las reservas para riego.
Sobre eso precisamente, sobre cómo aprovechar toda el agua que cae y no desperdiciarla, se habla en Córdoba en unas jornadas sobre las balsas de riego como solución a medio plazo al déficit que sufre la cuenca del Guadalquivir.
Según José Manuel Cepeda, presidente de la Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua), las lluvias que estos días han servido para empapar el suelo; pero a medio plazo apuesta por construir más balsas para almacenar agua.
Una fórmula para aprovechar las escorrentías y almacenar agua para regadío por la que también apuesta Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, que cifra en 6.000 las balsas que hay en la cuenca. Así lo explica Nuria Jiménez, su directora técnica.
Serían, a su juicio, la solución para compensar los 400 hectómetros cúbicos que tiene de déficit la cuenca, mientras se culmina la construcción de tres presas, que aún tardarán unos 15 años en entrar en funcionamiento.
Para Fenagua las obras para nuevas balsas deberían ser consideradas de interés general, para poder abreviar los trámites.
El agua es un bien escaso que los regantes necesitan para sus cultivos, que disponen este mes de una dotación extraordinaria de 30 hectómetros cúbicos.
