El cultivo hidropónico gasta una tercera parte de agua de lo que consume el cultivo en tierra. Hoy en día explica los detalles en una empresa de arándanos y fresas en Palos de la Frontera, Huelva
La sequía amenaza la temporada de frutos rojos. Muchos agricultores se han pasado a la modalidad de cultivos de altura que permite ahorrar agua y reciclarla. Hoy en día explica los detalles de este tipo de agricultura sostenible acudiendo a una empresa de Palos de la Frontera ( Huelva) con más de diez años de experiencia en el cultivo hidropónico.
El responsable de esta empresa explica que este tipo de cultivos prescinde de la tierra y se sustituye por bolsas con fibra de coco. Entre otras ventajas, también destaca la comodidad del recolector de los frutos, ya que están a la altura y no tienen que agacharse y al tener menos superficie se necesita menos agua para regar. "Como norma general gasta una tercera parte de lo que gasta el cultivo en tierra", dice. La única diferencia con respecto al cultivo en suelo es que en el caso del cultivo en altura, el fruto madura más rápido.