La Junta tacha de "decisiones incomprensibles" las sentencias del TC: "Ya no son noticia"

El Gobierno andaluz se resigna ante lo que considera "decisiones absolutamente incomprensibles" del Tribunal Constitucional (TC) sobre el caso de los ERE, tras conocerse la anulación de las condenas de los expresidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán, y ha lamentado que "ya no son noticia".

El portavoz del Ejecutivo autonómico, Ramón Fernández-Pacheco, ha dicho en rueda de prensa que era difícil dudar del fallo del TC, porque el presidente, Pedro Sánchez, ya lo "contó" en el mitin de Benalmádena (Málaga), cuando dio "instrucciones precisas de lo que tenía que pasar" con la exministra Magdalena Álvarez, y a partir de ahí empezó "la cascada de decisiones que son absolutamente incomprensibles".

Ha asegurado que la Junta "no tiene especial interés en que nadie permanezca o ingrese en prisión", porque no está para eso, sino "para recuperar hasta el último céntimo defraudado", algo sobre lo que ha mostrado su preocupación ante la anulación de la malversación.

Sin embargo, ha defendido que ante "la confusión" porque desde el PSOE se hable de "absolución, perdón", hay que recordar que el TC "no puede absolver a nadie" y devuelve la causa a la Audiencia de Sevilla.

Ante la futura sentencia que tendrá que elaborar ese órgano judicial, la Junta seguirá "con la ley enla mano haciendo lo posible y lo imposible" por recuperar el dinero defraudado. El portavoz ha insistido en que, "diga lo que diga el PSOE", se trata del mayor caso e corrupción en la época democrática.

Fernández-Pacheco, a falta de estudiar el fallo, ha expuesto que parece que el Constitucional dice que si un presupuesto aprobado por un político contiene partidas, "sea cual sea el fin", no comete delito, sólo quien ejecuta la partida presupuestaria.

A pesar de esa jurisprudencia, "diga lo que diga el Constitucional", ha garantizado que el actual Ejecutivo "nunca" creará un presupuesto "que contenga partidas oscuras destinadas a fines oscuros".

"La moral y los principios están por encima", ha manifestado el portavoz, quien ha lamentado que el TC establezca que un Parlamento puede aprobar "cualquier ley, sea cual sea el fin, sin que los políticos tengan cualquier tipo de responsabilidad".

El Gobierno andaluz no va a cambiar su política presupuestaria porque entiende que "eso no se puede hacer, diga lo que diga el Tribunal Constitucional".