El presidente de la Junta ha firmado este miércoles el decreto de bajada de impuestos que suprime el de Patrimonio y modifica el IRPF, que convierte a Andalucía en la segunda comunidad con menos impuestos
Moreno ha expresado su satisfacción por que esta comunidad "haya liderado el debate de la bajada de impuestos" en España y que con su "revolución fiscal" mire de "tú a tú" a comunidades como Madrid y Cataluña.
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha advertido este miércoles al Gobierno central de que acudirá a los tribunales si tiene la tentación de "maniobrar" contra su política de rebajas fiscales. Así lo ha manifestado durante su intervención en el Palacio de San Telmo de Sevilla en el acto institucional de firma del decreto ley de bajada de impuestos frente a la inflación aprobado ayer en el Consejo de Gobierno y que contempla una rebaja en el IRPF, la supresión del impuesto de patrimonio y la eliminación del canon del agua durante el año 2023. Al acto han acudido agentes sociales y económicos de la comunidad. Moreno, ha expresado este miércoles su satisfacción por que esta comunidad "haya liderado el debate de la bajada de impuestos" en España y que con su "revolución fiscal" mire de "tú a tú" a comunidades como Madrid y Cataluña.
"Me gusta que Andalucía haya liderado el debate de la bajada de impuestos", ha indicado el presidente de la Junta, que se ha preguntado cuántas veces antes esta comunidad había liderado un debate económico en España o se había posicionado como referencia en el ámbito fiscal. "Esta es la Andalucía líder, fuerte, sólida, orgullosa y ambiciosa en España", ha apuntado el jefe del Ejecutivo.
Ha añadido que le satisface que haya empresarios, inversores y capitales que, tras la decisión de eliminar el impuesto de patrimonio, se están fijando en Andalucía, además de muchos ciudadanos de otras comunidades, ya que este impuesto sólo está suprimido en Andalucía y Comunidad de Madrid.
"Me gusta que Andalucía sea protagonista de las reformas que necesita el país", ha indicado Moreno, quien ha insistido en señalar que no va a permitir que el Gobierno central -tras las críticas de algunos ministros a la decisión de eliminar el impuesto de patrimonio-, cuestione la autonomía fiscal de Andalucía y tenga la tentación de "centralizar los impuestos para evitar las bajadas". "Cualquier medida recentralizadora que suponga la pérdida de nuestro espacio competencias, tendrá una contundente respuesta judicial", ha sentenciado el presidente.
Para Moreno, Andalucía, sin duda, desde la anterior legislatura ha llevado a cabo una "revolución fiscal", puesto que el decreto aprobado ayer supone la sexta bajada de impuestos, pero, ante todo, la verdadera "revolución" que se ha producido "es de mentalidad" y ahora se ve como una comunidad fuerte, sólida y líder que cuenta con estabilidad política y seguridad jurídica.
Tras su publicación en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), el decreto entrará en vigor mañana jueves, según ha indicado el presidente. Luego será sometido a la convalidación del Pleno del Parlamento donde saldrá adelante en virtud de la mayoría absoluta que ostenta el PP-A.
Con la eliminación de un impuesto "anacrónico" como el de patrimonio, según el presidente de la Junta, se pretende atraer más inversiones a Andalucía que generen riqueza y empleo. Se trata de que los grandes inversiones establezcan su domicilio fiscal en esta comunidad y de evitar la huida de contribuyentes con rentas altas y con patrimonio.
Uno de los objetivos principales es "proteger a la economía andaluza y a las familias de los tiempos inciertos que vivimos" marcados por la subida de la inflación, de los costes energéticos o de los carburantes, a la vez que ha asegurado que este camino pasa por "quitar obstáculos y aliviar cargas" para atraer más actividad, más empleo y mayores oportunidades para los andaluces. Moreno ha afirmado que con ella se pretende que ésta siga siendo el foco de atracción de nuevas oportunidades que impulsan la actividad económica y el empleo.
De este modo, ha aseverado que esta nueva reforma fiscal, que dejará 360 millones extras "en los bolsillos de los andaluces" y que sumados a los 540 millones de las anteriores bajadas supone un total de 900 millones, tiene tres ejes principales que son la bajada del IRPF, la bonificación del 100% al Impuesto de Patrimonio y la suspensión del canon del agua.
La rebaja de impuestos, más allá de su afección a la fiscalidad, ha tenido un notorio impacto mediático, con respuesta institucional incluida, a nivel del Gobierno central o del catalán, lo que ha colocado a Moreno y a Andalucía en el centro de todos los focos.