El granadino José Soto sufrió un accidente militar que le dejó ciego y amputado de una pierna y eso le hizo virar su vida hacia la Historia y la Literatura, disciplinas que ha conjugado para triunfar, tal y como ha contado en La mañana de Andalucía.
José Soto Chica se quedó ciego y sin una pierna en un accidente con explosivos que sufrió como soldado. Fueron 14 días en coma del que despertó con la certeza de que "el accidente fue una llamada en el hombro para decirme que ya no tenía excusa para hacer lo que siempre había querido hacer", en referencia a la Historia y a la Literatura. Y es que "desde que tenía 5, 6 o 7 años la Historia era para mí fundamental y no hay día que no sea clave en mi vida", hasta el punto de que sea profesor en la Universidad de Granada, se haya doctorado con la tesis 'Bizantinos, sasánidas y musulmanes. De la lucha por el Oriente a las conquistas árabes' y esté triunfando ahora en la novela histórica.
Su última novela, "El dios que habita la espada", ha resultado ganadora de IV Premio de Narrativas Históricas de la editorial Edhasa. En ella recrea la Hispania de los siglos VI y VII cuando el rey Leovigildo, primer rey de Hispania, logró construir un solo Reino, una época que deja a Juego de Tronos "en niños de pecho comparado con nuestros Godos".
Recrea en esta y otras obras en torno a la historia unas guerras que conoce bien por su paso por Bosnia puesto que "aunque cambian los medios, los sentimientos son los mismos. Sé lo que se siente cuando uno tiene miedo o tiene que asistir a un compañero". Pero además, aquella experiencia le sirvió para saber lo peligroso que es la tergiversación de la Historia por parte de los políticos. "Viví la guerra civil en Bosnia y a pesar de que el 40% de los matrimonios en Móstar eran mixtos y por tanto que fuera impensable que todo saltara por los aires, la política lo consiguió. La Historia es una golosina muy apetecible para los políticos, pero hay que tener cuidado con ello, no pueden utilizarla para enfrentarnos".