En Despierta Andalucía, el experto en sostenibilidad ambiental y en edificaciones analiza a la luz de la ingeniería las consecuencias de la DANA en la provincia de Valencia y las formas de evitar o limitar los efectos de los fenómenos meteorológicos adversos.
"Tenemos que encauzar esos ríos, tenemos que laminar esas avenidas, para que ese agua no llegue con esa cantidad y con esa agresividad".
"Hay que vigilar "los sistemas de ordenación territorial y la planificación urbanística".
En el derrumbe de una ladera sobre la autopista que comunica Asturias y León, la AP 66, "sí que ha funcionado bien todo el servicio de prevención".
En Despierta Andalucía contamos con el análisis de Ángel Sampedro, experto en sostenibilidad ambiental y en edificaciones, para hablarnos de las consecuencias de la DANA en la provincia de Valencia. Y también de otro suceso ocurrido este pasado fin de semana: el derrumbe de una ladera sobre la autopista que comunica Asturias y León, la AP 66, una vía por la que circulan a diario más de 6.000 turismos y unos 1.200 vehículos pesados.
El derrumbe "ha sido espectacular, solo hay que ver las imágenes", explica Sampedro, "ha sido un desprendimiento brutal, normalmente no se llega a ocupar una calzada tan grande como en el caso de una autopista".
No obstante, considera que estamos ante "un evento que podríamos considera como probable; de hecho, gracias a los servicios de conservación de la autopista y a la rápida intervención de la Guardia Civil de tráfico, pues en este caso no ha habido víctimas, pero este es un riesgo que en el ámbito de las infraestructuras existe". Y destaca que, "a pesar de ser un día con muchísimo tráfico", "aquí sí que ha funcionado bien todo el servicio de prevención".
Director del Área de Ingeniería y Arquitectura en la Escuela de Ingeniería, Arquitectura y Diseño de la Universidad Alfonso X el Sabio, Ángel Sampedro relata cómo vivió las primeras noticias sobre la DANA que estaba devastando amplias zonas de Valencia hace ahora trece días: "como ingeniero, acordándome de todo lo que venimos reclamando desde el sector desde hace años, que falta una planificación hidrológica, que no se está actuando sobre las obras hidráulicas en España para prevenir, o por lo menos reducir la magnitud de estas catástrofes".
"La ingeniería tiene hoy en día herramientas, tiene instrumentos, para poder salvaguardar esas zonas", expuestas históricamente a los efectos de fenómenos meteorológicos adversos, como es el caso del litoral levantino. Asegura que "con las obras hidráulicas necesarias se puede proteger y se puede salvaguardar en muchísimos casos estas zonas".
Considera que habría que haber intervenido previamente en los cauces de los ríos y arroyos que se han desbordado. "Tenemos que encauzar esos ríos, tenemos que laminar esas avenidas, para que ese agua no llegue con esa cantidad y con esa agresividad", añade. "Frente a un cauce dirigido, como es el del Turia, que ha salvado a la ciudad de Valencia de estos efectos catastróficos, dejar los cauces naturales nos deja en manos de toda la climatología de lleno y creo que no es la solución más adecuada".
A este respecto se muestra firme: "las obras hidráulicas planteadas por la Confederación (Hidrográfica del Turia) le aseguro que habrían reducido muchísimo los efectos catastróficos de esta DANA. De hecho, ese cauce del Turia (...) ha demostrado su eficacia, iba lleno de agua, que es para lo que fue diseñado, e incluso todavía tenía cierto margen para poder llevar más agua". "Esas obras que estaban planificadas por la Confederación seguro que habrían reducido drásticamente las desgracias que se han producido".
"Con la construcción de presas, con la construcción de determinadas obras hidráulicas, se pueden atenuar estos efectos", subraya, aunque no olvida que "los efectos climáticos vienen siendo en los últimos años mucho más agresivos de lo que estábamos acostumbrados".
Por eso considera también fundamental recurrir a "las nuevas herramientas de la ingeniería (...) en cuanto a modelización de infraestructuras, para poder estar mejor prevenidos frente a este posible tipo de riesgos".
También, destaca, "hay muchas viviendas que ven comprometidas su seguridad, y esto viene derivado de unos años en los que lamentablemente no se exige, no se cumple con la normativa vigente, porque la legislación es muy clara a ese respecto, en determinadas zonas inundables".
Asimismo considera necesario vigilar "los sistemas de ordenación territorial y lo que es la planificación urbanística, para que tampoco nos metamos excesivamente en lo que son los cauces del agua, ante posibles avenidas".