El caso de Julen lo investiga el juzgado de Instrucción número 9 de Málaga
No han trascendido las medidas adoptadas
El Seprona confirma que el pozo y las obras eran ilegales
Hasta el momento lo que se sabe es que la Guardia Civil ha tomado declaración tanto al dueño de la finca como al empresario que realizó la prospección de agua. El pocero aseguró que taponó el orificio. Según la Junta de Andalucía, no se tramitó permiso de excavación.
El juzgado de Instrucción número 9 de Málaga que ha abierto diligencias previas ha empezado a recibir todos los informes, declaraciones y atestados relacionados con el suceso y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil trata de determinar cómo se hizo el pozo y si contaba con los pertinentes permisos, por lo que ha tomado declaración a la persona que lo hizo y al dueño de la finca.
Todas los informes, declaraciones y atestados que están realizando los agentes serán remitidos al titular de dicho Juzgado sin necesidad de que sea requerido por el juez, al igual que la prueba de ADN que se le hizo la semana pasada a un pelo de Julen (encontrado entre la tierra extraída del pozo) que ha sido cotejado con los familiares y con un biberón del menor.
El Seprona intenta dirimir qué se hizo antes, el pozo donde cayó el niño o la zanja que hay en los terrenos de la finca, un dato importante para la investigación, ya que podría dar veracidad a la declaración del empresario que abrió el pozo, Antonio Sánchez, quien aseguró que selló el orificio y que su actuación fue modificada posteriormente.