El depuesto Bashar el Assad no ha ofrecido resistencia y se ha asilado en Rusia con toda su familia. Pese a no haber encontrado resistencia, en estos 11 días han muerto 910 personas, entre ellas 138 civiles.
El futuro político del país se está planeando ya entre grupos de la oposición en el exilio y el llamado Gobierno de Salvación Nacional, el brazo político del principal grupo yihadista
La UE y los países árabes coinciden en pedir una transición pacífica. En EEUU, Joe Biden ve como una oportunidad histórica para cambiar el rumbo del país
Sólo 9 españoles viven en Siria. Según el Gobierno están bien.
Siria amanece este lunes sin la dictadura de la familia Al Assad, que ha ejercido un régimen ominoso y sangriento durante 53 años. Con la salida del sol ha terminado el toque de queda decretado la pasada tarde. Los sirios celebran el derrocamiento del dictador en solo 12 días de ofensiva de las milicias rebeldes, aunque con la incertidumbre de una transición liderada por los yihadistas. El presidente depuesto Bashar el Assad no ha ofrecido resistencia. Él y toda su familia han huido a Rusia, país amigo que les ha dado asilo por “razones humanitarias”, pero no respaldo militar. El Kremlin, centrado en Ucrania, lo ha dejado caer.
Se abre un período de incertidumbre, el futuro político del país se está planeando ya entre grupos de la oposición en el exilio y el llamado Gobierno de Salvación Nacional, el brazo político del principal grupo yihadista. Negocian un periodo de transición de 18 meses y la redacción de una nueva constitución. El hasta ahora primer ministro Ghazi al Jalali dice estar dispuesto a colaborar en una transición pacífica y ha propuesto que se convoquen elecciones libres. "Este puede ser un país normal, con buenas relaciones con sus vecinos y con el mundo pero debemos dejar que se ocupen de esto los dirigentes que el pueblo elija, estamos dispuestos a cooperar y a facilitar la transición", ha dicho.
Miles de sirios han celebrado en las calles el fin de la dictadura y de una guerra civil que duraba 13 años. En Madrid, 200 personas se han concentrado frente a la embajada siria para expresar su alegría y sustituir la bandera oficial por la de la independencia.
Pese a no haber encontrado resistencia, en estos 11 días han muerto 910 personas, entre ellas 138 civiles. En Damasco el palacio presidencial y las residencias de la familia han sido saqueados y miles de presos han sido liberados de las cárceles.
REACCIONES EN EL MUNDO
Rusia ha pedido una reunión urgente esta tarde al consejo de seguridad de la ONU para tratar del futuro en Siria. La comunidad internacional celebra la caída de El Assad. La UE y los países árabes coinciden en pedir una transición pacífica. El canciller alemán Olaf Sholf, el presidente francés Enmanuel Macron o el británico Starmer han deseado que se restablezcan cuanto antes la ley y el orden.
En EEUU, Joe Biden ve como una oportunidad histórica para cambiar el rumbo del país, ha expresado su voluntad de hablar con todos los grupos sirios y mantendrá, dice, en la zona a sus 900 soldados para evitar que resurja el Estado Islámico aunque solo podrá garantizarlo durante el mes y medio que le queda en la Casa Blanca. “Estaremos vigilantes. No nos equivoquemos: algunos de los grupos rebeldes tienen su propio y sombrío historial de terrorismo y abusos. Ahora están diciendo lo correcto, pero a medida que asuman una mayor responsabilidad, evaluaremos no solo sus palabras, sino sus acciones”, ha asegurado Biden.
Donald Trump se desentiende y deja claro que "no se le ha perdido nada en Siria". En su primera entrevista como presidente electo en la cadena NBC, Trump ha anunciado que dejará de apoyar a Ucrania y ha vuelto a amenazar con abandonar la OTAN si los países miembro no pagan sus cuotas y, esto es una novedad, si no mantienen una relación comercial más ventajosa con su país.
Sólo 9 españoles viven en Siria. Según el Gobierno están bien. Todavía no se ha organizado la evacuación porque están cerradas las fronteras y los aeropuertos. No obstante, el ministro de exteriores, José Manuel Albares, ha contado en TVE que la situación es de relativa tranquilidad a pesar de la rápida caída del régimen.