Un equipo de Canal Sur se ha adentrado en las aldeas del macizo del Atlas, la zona más castigada por el terremoto.
Conocemos la realidad de una de ellas, completamente destruida y donde no llega la ayuda.
La situación en las pequeñas aldeas del Atlas en las que se ha cebado el terremoto del pasado sábado es desoladora. Casas y edificios han quedado prácticamente destruidos, mezquita incluida. Un equipo de Canal Sur, con José Luis Sánchez Hachero al frente, ha estado en la pequeña localidad de Toulkin, donde el seísmo ha dejado a 250 familias si techo bajo el que guarecerse.
En la zona, las temperaturas caen en picado por la noche y mucho más en invierno. De hecho, la localidad es conocida por las fuertes nevadas que sufren. Y temen que el tiempo cambie -de hecho, están previstas lluvias en los próximos días- y sigan sin un lugar donde refugiarse.
Todo el pueblo está inhabitable y los vecinos están durmiendo al raso porque las construcciones o tienen grietas que las hacen inhabitable, o tienen grietas que las amenazan. Toulkin es un microcosmos de Marruecos donde confluyen dos necesidades: la del techo y la de comida y abrigo.
La ayuda allí llega, si llega, con cuentagotas. Los que más, personas bienintencionadas que, como unos amigos de Rabat que han venido hasta aquí, llenan su coche de lo que sus vecinos les proporcionan y recorren cientos de kilómetros para ayudar en lo que pueden. Es todo.
Una pandilla de amigos viene desde Rabat, 500 kms, para repartir productos de primera necesidad a las víctimas del terremoto más cercanas al epicentro, en una zona deprimida y abandonada. #TerremotoEnMarruecos #terremotoMarrakech pic.twitter.com/YipE8KcOBE
— jose sanchez hachero (@jsanchezhachero) September 12, 2023
En la vecina Amizmiz, el gobierno marroquí ha repartido unas tiendas que montan los propios damnificados y con la que sustituyen los chambados hechos de mantas y sábanas bajo las que duermen. Y, mientras lo hace, miran al cielo confiando en que el tiempo no cambie.
Los niños de Toulkin , a dos mil metros en el Atlas, cantan para olvidar que sus casas se han hundido…y para aprender el Corán… pic.twitter.com/friOe2A1Wy
— jose sanchez hachero (@jsanchezhachero) September 12, 2023