Maribel Montaño: "Cuestionar las políticas de Igualdad es cuestionar la Constitución"

Maribel Montaño, responsable de la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer de la Delegación del Gobierno en Andalucía, reconoce que "no eramos conscientes de la magnitud del problema sobre violencia género hasta que nos enfrentemos a él en 2004 con la aprobación de la ley". Fue en ese momento cuando la sociedad española empezó a hacer frente a este problema, destaca Maribel Montaño.

Asegura que en estos 15 años "hemos comprobado dos cosas: lo mucho que nos queda por hacer para reducir y suprimir la violencia de género en nuestra sociedad; y el tiempo y esfuerzo de las instituciones, administraciones, asociaciones de mujeres, y de los magníficos profesionales que nos han posibilitado una red de protección". 

25.000 denuncias en Andalucía en nueve meses. Este dato, da muestra, según Montaño, "de toda la estructura tanto judicial y policial, y la magnífica profesionalización".

Maribel Montaño asegura que es un número similar a 2017 y destaca "que toda la estructura puesta en marcha para canalizar su miedo, esa llamada de protección, tiene que continuar en pie".

Hasta noviembre de 2018, el teléfono de atención a las víctimas 016 registró 991 llamadas, mientras que el servicio de atención y protección para víctimas de violencia de género (Atenpro) contabilizó más de 2.500 usuarias dadas de alta.

Es contundente y dice que "una mujer que se sienta amenazada debe denunciar". Destaca que en comparación con 2017, hay un punto más, de llamadas del entorno de mujeres. "Gente que no las quiere ver sufrir", añade.

La responsable de la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer repasa los mecanismos y el protocolo que se sigue cuando una mujer llama al 016. Es atendida por profesionales, que a su vez, la derivan a otros profesionales de su entorno. Se pone en marcha un sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén),  que es un sistema informático que integra y coordina a todas las mujeres que tienen protección policial, con varios niveles.

Sobre el aumento de violencia hacia mujeres menores de edad, Montaño asegura que "no estamos haciendo suficientes esfuerzos en educación".

Para terminar se dirige a los que "quieren devolver a las mujeres a  los primeros capítulos de Cuéntame", es decir, al ámbito doméstico y a la supeditación de los hombres. A lo que responde "no nos vamos a dejar".

Y se dirige a quienes defienden la Constitución de una manera tan expresa, que se tomen tiempo para leerla, y a quienes cuestionan las políticas de Igualdad. Hace hincapié a que lean los artículos 14 y 15, y hace especial mención al artículo 9.2 y recuerda: Corresponde a los poderes públicos promover las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas; remover los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitar la participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social.

Concluye, "no cuestionemos las políticas de Igualdad, porque estamos cuestionando los valores constitucionales con letras mayúsculas, muy mayúsculas".