Coincide con el regreso de la actividad a las almadrabas, y esta semana un velero ha tenido que ser remolcado.
Se les recomienda bajar la velocidad de la nave, parar el motor, apagar el piloto automático y dejar el timón a la vía.
Con la vuelta de la actividad en las almadradas con la capturas de los atunes, vuelven también los primeros ataque de las orcas a los veleros en las costas de Cádiz. Ya va una veintena.
El último, esta semana: un velero de 14 metros de eslora y con tres tripulantes a bordo, que no han resultado heridos, tuvo que ser remolcado hasta el puerto de Barbate de madrugada tras ser atacado por orcas a siete millas al suroeste del municipio.
En estos casos, las recomendaciones son que se baje la velocidad de la embarcación, parar el motor, apagar el piloto automático y dejar el timón a la vía.
En caso de que se disponga de teléfono o aparato con el que poder grabar, es conveniente tomar imágenes de los animales, sobre todo de sus aletas dorsales, para que los expertos en estos cetáceos puedan identificarlos correctamente.