Enclaves como el Cañón de la Hoz, entre Rute e Iznájar, ofrecen todo un espectáculo para senderistas y curiosos tras las últimas lluvias.
Las esperadas lluvias en la Subbética cordobesa han dejado en las últimas horas cambios en el paisaje como el que se ha podido ver en el Cañón de la Hoz, entre Rute e Iznájar.
Las abundantes precipitaciones de los últimos días han hecho que sus cascadas y rápidos se inunden de agua. Los saltos por este río se convierten en un espectáculo para senderistas y curiosos que este domingo han disfrutado de la belleza de este escondido paraje que recoge el agua y la nieve de las estribaciones del pico Tiñosa y la Sierra de Horconera, los puntos más altos de la geografía cordobesa.