Paloma Viera nos cuenta su experiencia como familiar de un donante. En el peor momento de la vida la decisión de donar dio esperanza de curación a otras personas y, al mismo tiempo, supuso un bálsamo para su sufrimiento.
La donación de órganos y tejidos es un acto de solidaridad que permite que las personas que esperan un trasplante puedan tener una segunda oportunidad de vida.
Esto sucede gracias a la generosidad de un donante que en el peor momento, cuando pierden a su ser querido, dicen “Si a la vida” y para ellos supone un bálsamo saber que su familiar se marcha dando vida.
Paloma Viera así lo vivió al perder a un ser querido y nos cuenta su experiencia como familiar de donante, como alguien que sabe y siente que esa donación fue la medicina que dio vida a otras personas.