Los ayuntamientos de Motril y Almuñécar destacan el buen funcionamiento del dispositivo de prevención, que ha dado como resultado daños mínimos en ambos municipios.
La costa granadina recupera poco a poco su ritmo normal tras la tromba de agua caída en la noche de este jueves, y los operarios se afanan en limpiar los daños en zonas puntuales.
Los ayuntamientos de Motril y Almuñécar inciden en el buen funcionamiento del dispositivo de prevención, que ha dado como resultado daños mínimos en ambos municipios.
El el caso de Motril, el balance recoge pocas incidencias, después de que durante la noche la tormenta descargara unos 70 litros por metro cuadrado, provocando inundaciones fundamentalmente en la zona del Camino del Pelaillo.
Las desembocaduras de la Rambla de las Brujas y el barranco de la Culebra desaguaron "en perfectas condiciones", según ha explicado la alcaldesa, Luisa García Chamorro, quien afirma que "no hubo grandes averías y las que ocurrieron ya han sido subsanadas, como los cortes de luz en la zona del Balcón de San Fernando de Motril, la anegación de agua en la Plaza de la Coronación o la inundación en la zona del Camino del Pelaillo".
Por su parte, en el municipio de Almuñécar (Granada), donde la DANA dejó esta pasada noche una media de precipitaciones de 55 litros por metro cuadrado, siguen limpiando el barro de sus calles, especialmente en las zonas más afectadas, en las inmediaciones de las desembocaduras del Río Jate y Río Seco; y trabajan para devolver a la normalidad sus playas, con la retirada de los residuos acumulados por el paso del temporal.