En Andalucía, se puede ver afectada la industria agroalimentaria.
La aceituna negra ya tiene un arancel del 30% lo que hace inviable su exportación a EEUU.
Trump exige a Europa que compre su petróleo y su gas.
A diez días de que Donal Trump se convierta en el nuevo presidente de Estados Unidos, en España hay preocupación por su amenaza de subir los aranceles. En Andalucía, los empresarios temen que se apliquen a algunos alimentos que exportamos a este país y se mantengan o suban a productos como la aceituna negra de mesa.
Para la economía europea se avecina un nubarrón en las relaciones comerciales con Estados Unidos. Habrá nuevos y más aranceles para exportar productos a ese mercado, eso es seguro. En Andalucía, se puede ver afectada la industria agroalimentaria, uno de nuestros pilares económicos.
Y en los productores de aceituna negra de mesa aún pesa un arancel del 31 por ciento, que, les hace inviables las ventas a Estados Unidos. Por eso la batalla comercial está servida.
El mercado norteamericano es nuestro primer cliente fuera de la Unión Europea. Les vendemos aceite de oliva, 735 millones en 2024, combustibles para motores y aceites minerales y manufacturas de piedra y yeso, por un total de 2.700 millones en el último año. Unas cifras que van creciendo cada ejercicio.
Trump amenaza a toda la Unión Europea con sus nuevas tasas del 10 al 20 por ciento, pero especialmente a Alemania, Francia e Italia. Exige para rebajarlas, que Europa compre su petróleo y gas y eso les ayude a ir mejorando su deficitaria balanza de pagos.