El presidente del club no ocultó su enfado por la expulsión de Chimy Ávila en el minuto 34.
Ha pedido explicaciones al Comité Técnico de Árbitros.
El presidente del Betis, Ángel Haro, ha arremetido contra el árbitro del encuentro que le enfrentó este domingo con el Villarreal, Guillermo Cuadra Fernández, por la expulsión de Chimy Ávila, que podría haberle costado la derrota al club de no ser por "el partidazo que el equipo ha hecho". Dice Haro que la decisión tanto del árbitro de campo como del del VAR "más que un erro grave, es una grosería y un insulto al beticismo".
Según el presidente, "es una grosería" que no se revisara la actuación y que la actitud del colegiado fuera sacar tarjetas "a diestro y siniestro" cuando se le pidió la revisión. "La actuación arbitral ha sido inexplicable", decía Haro en la televisión del club y se muestra convencido de que habría sido "determinante" si no es por "el partidazo" del equipo.
Además, cree que este tipo de actuación del árbitro Cuadra Fernández "no es la primera vez" que ocurre y confía en que el Comité Técnico de Árbitros actúa en consecuencia.