¿Cómo se puede bajar el precio de los carburantes?

La mañana de Andalucía ha querido sondear las posibilidades que tiene el gobierno para rebajar el precio que pagamos por gasolinas y gasóleos que a pesar de la bajada del barril de Brent que es el referente para el alza y la bajada de precios en las gasolineras, sigue rondando los 2 euros el litro.

Para ello ha contado con la voz experta de José María Mollinedo, secretario general de Gestha, colectivo de técnicos del Ministerio de Hacienda quien ha aclarado que el gobierno tiene poco margen para rebajar impuestos si no hay un acuerdo en la Unión Europea. "Estos impuestos especiales están sujetos a directivas europeas que establecen una tributación mínima. En España solo habría margen de 14 céntimos en el caso de la gasolina más cara, la de 98; en la de 95 el margen sería de 11 céntimos; para el gasóleo de 5 céntimos; de solo un céntimo en el caso del gasóleo bonificado de agricultores y ganaderos y ni siquiera hay margen en el caso del gasóleo profesional de los transportistas que ya está en la tributación mínima", ha explicado.

Mollinedo no ve viable que la UE vaya a cambiar "a corto plazo" estos márgenes porque tendría que ser "por acuerdo unánime de los 27 países de la Unión y ya se ha visto que se ha tardado un año para al menos hablar en cuanto a la energía eléctrica de sacar el gas de la factura de la luz".

Hay países que han buscado otras formas de bajar el precio de los carburantes como Francia o Polonia, pero desde Gestha han explicado la realidad que hay detrás. "Francia ha subvencionado el combustible para los colectivos más desfavorecidos en una medida que le va a costar 2.000 millones de euros, mientras que la rebaja del Iva de la electricidad en España tiene un coste de 12.000 millones siendo un país mucho más pequeño. En cuanto a Polonia, sí ha bajado los impuestos de forma unilateral y lo une así a una larga lista de acciones investigadas o sancionadas de la Unión Europea", ha explicado Mollinedo.

Este responsable técnico de Hacienda desmiente que el gobierno se esté forrando con la subida del precio de la gasolina porque "el impuesto a los carburantes se aplica por litro de combustible vendido y no le afecta el precio que puede subir o bajar que el impuesto es siempre el mismo; 54 céntimos en el caso de la gasolina y 33 céntimos en el caso del diésel de automoción". 

Sí que ha admitido que con la inflación, se recauda más por la vía del Iva, pero recordando que "la mitad va para las Comunidades Autónomas" y recomienda en estos casos que "ese excedente debería servir para aprobar desgravaciones fiscales que son mejores que las rebajas de impuestos que en sí misma no ha servido para que baje el precio de la luz".