Cuando era adolescente creó al 'Capitán Morcilla', un cómic, que poco después se convirtió en el videojuego 'Capitán Sevilla'
Tuvo claro desde el principio que su camino iba a estar rodeado de imágenes en movimiento
Es productor y director de cine, cacereño, andaluz de residencia y viajero: así vive esta 'Fase de Transición'
canalsur.es le acerca las reflexiones de artistas andaluces o que vivan en Andalucía sobre cómo afecta la pandemia al mundo de la cultura y al proceso creativo
Ángel Tirado, nacido en Cáceres (1970), reside en Sevilla desde 1981. Cuenta con una larga experiencia produciendo audiovisuales para museos de Oriente Medio y Europa. Además de productor, crea videoarte y es director de cine.
PANDEMIA= CASA+PROYECTOS+CINE
La pandemia, en mayor o menor medida, ha hecho "bastante daño al sector de la producción audiovisual porque se han tenido que cancelar muchos rodajes, se han tenido que posponer estrenos. Ha sido bastante dramático en algunos casos", nos cuenta el cineasta.
Una de las cosas que más le ha influido es el no poder viajar. Gran parte de su actividad profesional la realiza fuera de España. Trabaja sobre todo en Oriente Medio y en algunos países de Europa. Con esta situación le ha sido imposible desplazarse. "Es imposible ir a rodar, las reuniones hay que tenerlas de manera telemática, un cambio en la comunicación que todos hemos aprendido: ahora hasta las reuniones sociales se hacen telemáticamente".
También ha sido un tiempo que le ha servido para prepararse para lo que viene a continuación. "La verdad es que a pesar de estar parados en el sentido de no movernos y no poder desarrollar cierta actividad, hemos seguido trabajando. Creo que hemos tenido un mayor nivel de intensidad que antes porque no tienes esos desplazamientos diarios a la oficina: estás operativo por la mañana, te sientas delante del ordenador y no te das cuenta cómo van pasando las horas y cómo pasan reuniones tras reuniones ... y al final se te pasan las horas volando".
Sobre todo, dice, se ha centrado en crear proyectos para llevarlos a la práctica cuando todo esto se normalice del todo y, así, "intentar que el daño producido sea el mínimo posible ".
Y también le ha dedicado más tiempo a la cultura. Sobre todo al cine, que es lo más fácil de consumir y lo que ha echado de menos durante el confinamiento porque normalmente suele ir bastante. "El cine ha sido mi refugio durante el confinamiento".
AL PRINCIPIO FUE EL CÓMIC
Su interés por la cultura y por el arte nace del mundo de las viñetas. Los cómics llegaron pronto a su vida. Leía mucho y le gustaba dibujar. Se atrevió él solo con un cómic cuando era adolescente. Acabó publicándose en la revista del instituto. Le fue bien. Años más tarde, este Capitán Morcilla se convirtió en el Capitán Sevilla, uno de los vídeojuegos que triunfó en los años ochenta.
Le atrapó lo visual, el arte visual, lo que tiene movimiento. El videoarte, el cine, el cine en lo audiovisual.
LA CULTURA Y EL ARTE INDEPENDIENTE
La cultura forma parte de su vida cotidiana. Es un elemento necesario para el desarrollo y para el bienestar personal. "Hay países que lo tienen muy claro. Apoyan a sus creadores, a su cultura. No digo que aquí no lo hagamos. Aquí se promociona y se protege mucho el arte, pero creo que hay que hacer algo más: hay que potenciar a los artistas independientes, a los que no tienen tantos medios, pero sí muchas cosas que aportar".
Cree que las manifestaciones artísticas y culturales "no están al mismo nivel por quienes la gestionan, quienes la apoyan o tienen que darles un valor, desgraciadamente". Cree que en la práctica hay como categorías, niveles; algo que debería evitarse al menos desde los poderes públicos, dice Tirado. "Estos deberían promocionar el
arte independiente, el que no tiene conexión con algún tipo de poder, de potencia económica o de otro tipo". Este es el que necesita darse a conocer.
"ABRIR HUECO"
Para que la cultura ocupe el lugar que tiene que ocupar hay que apoyarla, apoyar a su gente, a los que tienen menos medios y a los que aportan innovación, puntos de vistas novedosos. Los que se arriesgan más, insiste Tirado. Cree que es ahí donde está la clave: hay que "abrir hueco".
Luego por otro lado, añade, que hay que facilitar que la gente tenga acercamiento a esta cultura. "Tenemos que
convencer a la gente que el arte y la cultura forman parte de nuestra vida, de nuestro patrimonio y de lo que somos".
Dice que se debe generar inquietud, interés para que la gente vaya a visitar los museos, al cine, al teatro o a las salas de exposiciones. Eso es muy importante, entre otras cosas, porque de esta manera es más fácil que los artistas sobrevivan por su propia cuenta, sin necesidad de tener que estar subvencionados o recibir otro tipo de ayuda.
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