Domi del Postigo: "Establecer un control parental para limitar el acceso de los menores al porno es muy complicado"

El presidente del Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA), Domi del Postigo, analiza en "Despierta Andalucía" la decisión del Parlamento andaluz de crear un grupo de trabajo sobre la protección de los menores ante el porno, tomada a raíz de las jornadas anuales que organiza el Consejo.  

El informe del Consejo, “La indefensión de los menores ante la pornografía en Internet”, revela el libre e ilimitado acceso de los menores a contenidos potencialmente peligrosos para su desarrollo, como pornografía y gore, a través de la red. Son "páginas y lugares que están haciendo un verdadero daño a la chavalería", ha destacado Domi del Postigo.

Hay que recordar que "el móvil es una pantalla abierta de acceso gratuito y fácil", ha subrayado, "al infierno si es necesario". Pero para el presidente del Consejo Audiovisual de Andalucía, establecer un control parental eficaz "es muy complicado". 

Por parte de la Comisión Europea "se va a intentar acreditar la edad para evitar que los menores accedan al porno", ha destacado, pero "el control parental tiene un riesgo y es que los niños y niñas no tengan en su casa una familia muy estructurada", ha dicho Domi del Postigo, o que "los padres no tengan una mínima capacidad técnica". En esos casos, "los niños más desprotegidos serían aquellos en los que cargáramos la responsabilidad", ha declarado.

El presidente del Consejo se ha referido al caso de Italia, que acaba de imponer un control parental obligatorio que deben activar las operadoras de telefonía. "Ojalá sea así", ha dicho, pero "mientras se consigue acreditar técnicamente algún tipo de herramienta que por fin pueda evitar que un niño entre en este tipo de lugares, tendremos que seguir educando mucho más de lo que hacemos, eso que se llama la alfabetización mediática, a todos nuestros niños".

En España la edad media de inicio al porno sigue bajando, y se sitúa ya en 11 años.

"Habría que haber forzado un diálogo con las grandes empresas tecnológicas para que fueran ellas las que asumieran la realidad legal de que son ellas las que están obligadas a verificar la edad" de los usuarios que acceden a contenidos exclusivamente para adultos, ha concluido.